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Continúa malestar por procesos penales en la Fiscalía, y disciplinarios y administrativos dentro de la institución
Secuelas del 30 de septiembre
Dos meses después de la revuelta policial del pasado 30 de septiembre, hasta el momento han sido procesados 823 gendarmes, tanto al interior de la Policía Nacional como por parte de la Fiscalía General.
Según confirmó el coronel Patricio Ramírez, vocero oficial de la Policía, "administrativamente, tenemos en total 681 sanciones disciplinarias; de las cuales, 38 son oficiales de jerarquía superior, 42 son oficiales de jerarquía subalternos, y 586 son clases y policías".
Dentro de esa cifra (681) no constan quienes son procesados por la Fiscalía. A ese nivel, hasta el momento, son investigados y tienen orden de prisión preventiva tres oficiales con jerarquía superior y 16 clases y policías, lo que da un total de 19.
En cambio, con medidas cautelares, es decir que no se les ha dictado la prisión preventiva pero se les ha dispuesto que no abandonen el país y se presenten cada determinado tiempo en la Fiscalía, suman cinco oficiales de jerarquía superior, cuatro oficiales subalternos y 14 clases y policías, que dan un total de 23.
Al margen de las sanciones disciplinarias a los 681, Ramírez explicó que hay un grupo de 123 elementos que son juzgados por los Consejos de la Policía, por conducta profesional: constan seis oficiales superiores, 11 oficiales subalternos y 106 clases y policías. "Contra ellos, diríamos que son investigaciones no punitivas, que se las realiza al interior de la institución policial".
Sin embargo, la sanción administrativa o disciplinaria implica que, al margen de la sanción penal que pudieran recibir los implicados por parte de la Fiscalía, la institución también realiza un trámite que no necesariamente puede ser por el mismo hecho que son juzgados o investigados por la Fiscalía, pero que igualmente les puede significar la salida de la institución.
Las sanciones dentro de la Policía, además, pueden provocar que la carrera del procesado se perjudique, lo cual redundaría en que no asciendan con el resto de sus compañeros.
"Queda como antecedente el que haya tenido un juzgamiento de conducta profesional que, al final, para su ascenso, puede influir de alguna manera. En todo caso, por el tema de mérito o demérito que se toma en cuenta para los ascensos, sí es un demérito y eso implica que su calificación sea menor", dijo.
Mientras se ventilan sus procesos disciplinarios, administrativos y penales, los implicados no pueden prestar sus servicios dentro de la Policía. De acuerdo con la legislación policial, tienen 60 días para defenderse, es decir presentar sus pruebas de descargo dentro del debido proceso. Para este tipo de procesos requieren de un abogado patrocinador.
Del juzgamiento interno se ocupan los tres consejos existentes. Para los oficiales superiores, hay el Consejo de Generales; para los oficiales subalternos, el Consejo Superior; y, para los clases y policías, el Consejo de Clases y Policías.
El malestar persiste. Pasquines similares a los que aparecieron antes del 30 de septiembre estarían circulando nuevamente por la Internet, de acuerdo con miembros de la Policía que pidieron no revelar sus nombres.
En esos documentos se criticaría a la nueva cúpula policial, así como a la falta de información que existe sobre lo que sucede en la institución. Ante esto, se habría ordenado realizar un control a los correos electrónicos, tanto institucionales como privados de los elementos policiales.
Dos meses después de la insubordinación policial, en un breve sondeo realizado al personal de la Policía, de tropa y oficiales, la sensación que dicen tener es que la institución encargada de velar por el orden ha perdido, sobre todo "moralmente".
Hasta ahora existe temor de que otros elementos sean involucrados en los procesos que adelanta la Fiscalía por el solo hecho de haber pasado y salido a la calle cuando se produjo la protesta del 30 de septiembre.
En la tropa todavía existe incertidumbre sobre el pago de horas extras, que debía aplicarse desde enero, pero todavía no hay el reglamento, según dijeron.
En cuanto a las condecoraciones, también hay desazón, pues quienes a inicios de año cumplen los 25 o 30 años debían ser reconocidos económicamente por su trabajo y condecorados, pero no saben qué pasará con ellos, y los que llevan 23 o 24 años también tienen sus interrogantes.
La reforma ahora contempla la "compensación", con el detalle de que si bien antes se demoraban entre 10 meses y un año en darles el dinero correspondiente a las condecoraciones, lo hacían en un solo desembolso. Ahora lo harían en el transcurso de los cinco años subsiguientes al ascenso.
Recuento de los hechos. Ayer, BLANCO Y NEGRO publicó las versiones del Ejército y de las unidades élite de la Policía GOE y GIR que participaron en el operativo que sacó al presidente Correa del Hospital de la Policía.
En el mencionado reportaje se da cuenta de las versiones sobre los francotiradores, la coordinación entre estos tres grupos, los heridos del GEO, el equipo utilizado por Froilán Jiménez, el operativo que comenzó desde la Mariana de Jesús, etc.
Fuente: DIARIO HOY
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