martes, 30 de noviembre de 2010

DIARIO EL UNIVERSO es un proceso en extinción

***SNN

 José Orús, asesor de El Telégrafo C.A
 
El asesor de El Telégrafo C. A. se refiere a las distorsiones publicadas por un medio local en contra de los diarios públicos El Telégrafo y PP El Verdadero.


Aclara las razones por las que han sido removidos algunos empleados de estos dos periódicos.


Calmo y con una sonrisa en su rostro, como indicando que cuando se hacen las cosas bien no hay de qué preocuparse, o parafraseando sus propias palabras, que cuando hay ruidos alrededor es porque sus autores están asustados, José Orús habla de los ataques mal intencionados de diario El Universo a los medios públicos El Telégrafo y PP El Verdadero.


"Cuando se tiene techo de vidrio no se puede tirar piedras a la casa vecina"

Muestra documentos que reflejan la crisis económica por la que atraviesa esa compañía, editora de El Universo y Súper, que en el 2009 redujo sus utilidades en un 44%, es decir a casi la mitad de lo que fueron en el año previo. Cree que probablemente esa es la razón por la que intentan desprestigiar a El Telégrafo y al PP.


José Orús, con más de 33 años de experiencia en medios de comunicación, critica el hecho de que El Universo continúe autodenominándose “El mayor diario nacional”, cuando hace bastante tiempo que dejó de serlo. “Eso es como cuando las personas se cambian de apellido porque se avergüenzan del que tienen”, sentencia.


Usted dice que el eslogan de El Universo no se aplica a su realidad de ventas; ¿quiere decir que no es el mayor diario nacional?
Definitivamente no lo es. Ellos lo saben. Y tanto es así, que El Universo circula básicamente en Guayaquil; en el resto del país su presencia pasa inadvertida. Y no tienen que creerme a mí, porque si preguntan a cualquier persona que se dedica a la venta de periódicos en Cuenca, Riobamba o Ambato, va a dar esa respuesta.


Al margen de lo que digan las empresas encuestadoras, que también lo ratifican, cada día la lectoría de ese diario es menor. El Universo es un proceso en extinción.


Si ellos no son el mayor diario nacional, ¿entonces están vendiendo un eslogan falso?
Cuando su eslogan no cumple con una realidad, es como cuando un hombre se cambia de apellido. El eslogan es como el apellido de un diario, es la forma de identificar al periódico, al canal de televisión o a un medio en general. Si usted no es el mayor diario nacional, no puede poner esa frase. Esa es la falla más grande, porque la gente percibe la mentira, el engaño y los sesgos en lo que ellos dicen. No se puede encapsular la realidad para que sus lectores perciban un mundo inexistente. Por eso es que cuando vienen las elecciones en el país, los resultados contradicen totalmente lo expresado por un medio de comunicación politizado. La gente escoge lo que quiere. El arma del lector es el dinero con el que compra el periódico todas las mañanas; es el control remoto de la televisión, o el dial de una radio; la gente simplemente lo cambia y busca otra alternativa de información. Y las hay electrónicas, audiovisuales y de todo tipo. Felizmente en Ecuador tenemos alternativas de información.


¿Están usurpando un eslogan, afirmando algo que no es cierto?
Definitivamente. Ellos lo saben y seguramente leerán esto: hay un “diario popular” que se edita en Guayaquil, que es el de mayor circulación; no son ellos y tengo que ser extremadamente claro en decirlo, ellos no son el mayor diario nacional.


¿A qué se refiere cuando dice que no se puede encapsular la información?
Mire usted, estos diarios que tienen sesgo político, que les interesa que lo perciban así o han devenido definitivamente en políticos, y los periodistas que juegan a la política, llegan a autoconvencerse de que para ser guayaquileño hay que seguir la línea que ellos indican sobre lo que es ser guayaquileño; de que para ser ecuatoriano hay que tener un perfil como el que ellos señalan; pero el pueblo es intuitivo -decía el doctor Velasco Ibarra-, el pueblo sabe cuando le están mintiendo o sesgando la información. Cuando esta gente se encuentra con una persona que les gana las elecciones en forma contundente, no saben cómo explicarse y buscan torcer la realidad hacia el direccionamiento señalado inicialmente, y cuando no lo logran y encuentran un Gobierno bien parado, que busca acabar con la pobreza y mejorar las condiciones generales del país, simplemente incitan a la convulsión y se ponen con estas locuras, con estas acciones de atacar a otros.


Ellos encapsulan la información y pretenden vender su realidad como la única verdad Cuando encapsulan la verdad y pretenden vender sus puntos de vista como la verdad absoluta, usted dice que la gente se da cuenta.¿Realmente se da cuenta?
Tanto se da cuenta que con fecha 31 de marzo del 2010 se comunicó al personal de diario El Universo, a través de un señor Leonardo Parral, que las utilidades de esa empresa han bajado en el 44%; escúchelo bien, en 44% han bajado las utilidades, y dicen que han perdido tres páginas diarias de publicidad en promedio, es decir más de mil por año, por eso no pudieron pagar este año el monto de las utilidades del año anterior a su personal.


En las publicaciones que atacan a El Telégrafo C. A. ellos hacen noticia en torno a los despidos que se han dado en esta empresa. ¿Qué tiene que decir sobre este supuesto problema?
Se escandalizan porque la compañía El Telégrafo C. A. ha removido, pagando lo que es correcto, a 31 personas. Ellos tienen -al mes de diciembre del 2009- 120 demandas laborales. No le digo cuántas habrá en el 2010, sin embargo no se dice nada. Cuando se encapsula la noticia, se lo explico: hace un par de días un medio escrito de Quito tuvo un problema en la Aduana por la declaración de unos productos que había importado; no voy a analizar esto, pero la noticia para ellos no existe. Si hubiese sido un miembro del Gobierno el que intentó ese fraude, ya estaría publicado en primera plana, eso no es hacer periodismo.


Aquí la libertad de expresión les permite sacar una página de infamias y calumnias contra la editorial El Telégrafo C. A. y fíjese la mala fe, se confunde editorial El Telégrafo que pronto se llamará Editogran, con el producto El Telégrafo; se admiran de que un periódico sostiene al otro. Lo que existe es una editorial que tiene dos periódicos, pero lo hacen de mala fe, porque no es que no saben.


¿Pero, por qué se ha despedido gente de El Telégrafo y del PP?
Los despidos han sido por dos razones: porque no se ajustaban profesionalmente a las exigencias de los diarios o porque intentaron cometer algún acto que no estaba apegado a la ley. En todos los casos El Telégrafo les ha pagado todos sus haberes y beneficios que les corresponden por ley; nosotros no tenemos conflictos. Como decía antes, El Universo, a diciembre del 2009 tenía 120 demandas laborales.


Y entonces, ¿por qué firmaba El Telégrafo los contratos?
El Telégrafo los firmaba porque era la empresa jurídica existente al momento en que se presentaban las negociaciones. En el 2011 será Editogran la que firme contratos. El producto PP y el producto El Telégrafo no firman contratos, porque son productos no empresas; la persona jurídica se llama Editogran, antes se llamaba El Telégrafo, porque contaba con un solo producto que tenía el mismo nombre.


¿A qué atribuye, entonces, los ataques de El Universo a los medios escritos del Estado?
Mi querido amigo, cuando usted tira una piedra por encima de la cerca y percibe el impacto, es señal de que la piedra le ha caído a alguien. Qué preocupación debe haber por el periódico PP, que vende 40, 50 ó 60 mil ejemplares. No importa la cantidad, pero alguien ha dejado de vender esa cantidad de periódicos y por el escándalo ya sé quién es. ¿Cómo no van a estar preocupados? Yo los comprendo, pero no los justifico. El problema es que ellos tienen un producto, me refiero a diario Súper, que en el 2008 llegó a facturar 1'800.000 dólares, en el 2009 bajó a 607 mil, y en el 2010 a 461 mil dólares, en 10 meses; eso es más o menos 40 mil dólares mensuales, lo que no les alcanza ni para los caramelos y por eso tienen razón de estar preocupados.


¿Esto se ve reflejado en la venta esquinera de los periódicos...?
Por supuesto. Esos falsos títulos de que el Súper era un diario familiar y ahora sacan gente descabezada y mujeres con escasa ropa, intentando parecerse al “periódico líder popular”, no es otra cosa que una actitud incoherente, sesgada e inconsecuente. Cuando uno tiene techo de vidrio no puede tirar piedras a la casa vecina.


¿Por qué encuentra usted tanto apasionamiento y dedicación para desprestigiar a los diarios públicos?
Hay algo que le voy a decir: a mí nadie me va a quitar el derecho de, como guayaquileño, opinar. Pero la historia de ellos está cargada de pasiones, ¿o es que ya han olvidado que mandaron a colocar una placa en el urinario público que tenían en la calle Escobedo con el nombre de un periodista que no era de su agrado? Las peleas entre socios por unas cuantas acciones, con desalojos respaldados por policías.


¿Qué habría pasado si el Presidente cerraba El Telégrafo, que desde hace cuarenta años tiene pérdidas? Igual se hubiesen opuesto y habrían criticado que se cerraba una institución guayaquileña, emblemática. Cualquier cosa que las autoridades gubernamentales hagan será criticado por ellos.


Datos - José Orús
Asesor de El Telégrafo C. A., empresa editora de los diarios El Telégrafo y PP El Verdadero.


Accionista y Gerente General (regional Guayaquil) por 13 años de diario Hoy.


Vicepresidente, 9 años, de Granasa, editora de los diarios Expreso y Extra.


Gerente General de Canal 4 de Guayaquil, por 8 años.


Fuente:Redacción Actualidad - actualidad@telegrafo.com.ec

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