“Cuando llegó la hora de almorzar ya no vimos a la embarcación. Como a las 3 o 4 (de la tarde) volvimos a la costa porque estábamos bajos de combustible”, señaló Aguayo.En un radio de 180 millas al norte de la isla Pinta, en Galápagos, dos aeronaves y un buque seguían buscando ayer la embarcación pesquera San Antonio, desaparecida con tres tripulantes desde el miércoles pasado, mientras cumplían labores de pesca junto a otras tres fibras.
Familiares de los pescadores desaparecidos (Francisco Freire, de 49 años; Henry Jiménez, de 38, y Wilmer Freire, de 21) se sumaron a la búsqueda en los sobrevuelos, contó el teniente Álex Bernal, jefe de Operaciones (e) de la Dirección Regional de Espacios Acuáticos y Guardacostas Insular. “Todos estamos con esperanzas. Hasta ahora no hemos abordado el tema de una pérdida o naufragio, pues todo nos lleva a que el barco está a la deriva”, contó.
Felipe Aguayo, de 45 años y quien era parte de los nueve tripulantes que salieron a pescar el miércoles 26 de septiembre, explicó que a eso de las 07:00 de ese día partieron de la isla Pinta y se metieron unas seis millas mar adentro. Recordó que cerca de las 11:00, las tres fibras pescaban, al igual que el buque madre, que se fue alejando para no interceder en las labores de las embarcaciones menores.
“Cuando llegó la hora de almorzar ya no vimos a la embarcación. Como a las 3 o 4 (de la tarde) volvimos a la costa porque estábamos bajos de combustible”, señaló Aguayo.
Sin embargo, las fibras quedaron fondeadas (varadas). El viernes, según un informe de la Dirección Nacional de los Espacios Acuáticos (Dirnea), fueron rescatados tres de los seis tripulantes de las tres lanchas por el yate Wolf Buddy, que logró remolcar una de las fibras.
Mientras, el sábado, en un sobrevuelo se localizó a las dos fibras con tres ocupantes. Según el documento oficial, que coincide con la versión de Aguayo, la embarcación Sierra Negra asistió a esa tripulación, que el domingo llegó a San Cristóbal, donde viven los pescadores.
Aunque el viernes se activó el plan SAR de búsqueda y rescate, el sábado subió a la categoría internacional, pues el Distrito 11 (EE.UU.), Panamá y Colombia conocen las características del buque, en caso de que aparezca en esos territorios.
Aguayo dijo desconocer qué habría ocurrido con la embarcación San Antonio, de matrícula P-01-01026. “No había problemas en la máquina, nunca estaba haciendo agua como para que se haya hundido”, dijo.
También aseguró que en la embarcación desaparecida se llevaba alimento como para quince días para los nueve pescadores, pues preveían estar ese tiempo en el mar.
En tanto, ayer, familiares de los tres desaparecidos se reunieron con las autoridades marítimas en la Gobernación de Galápagos para analizar estrategias para la búsqueda, que se la hacía con el buque Orión, un avión de la empresa Saéreo y una avioneta naval.
Bernal manifestó que es posible que el capitán del San Antonio (de 10,37 toneladas y 10 metros de largo) haya anclado para evitar alejarse.
Fuente: EL UNIVERSO*
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