Manabí.- La falta de lluvias sigue causando estragos en el campo, en cantones como Junín, en Manabí (foto), y otros de Los Ríos, El Oro, Guayas, Loja y más provincias.
BABA, Los Ríos. Teodoro Morán se lamenta al ver su cultivo de arroz marchito por la sequía, en la cooperativa 22 de Mayo.BABA, Los Ríos. Ante la falta de un sistema de riego, el martes pasado, Ronny Medina vertía agua con un balde sobre los pocos cultivos que intenta salvar su familia en el recinto Versalles.
CHONE, Manabí. En la parroquia Boyacá, agricultores muestran cómo la falta de lluvias secó las mazorcas.
El Universo.- Agricultores más afectados dependen solo de lluvias para sus cultivos y dicen haber perdido todo.
“Es que así llueva, ya está perdido todo”, dice con resignación Darwin Vera, agricultor de la comuna Los Casados, del cantón Junín (Manabí), mientras arranca de la tierra cuarteada una de las plantas de maní que sembró en una cuadra de esta zona alta. Muestra las vainas del grano pasmadas por la falta de agua, y cuenta que en unos días tendrá que remover el cultivo y rescatar semillas para intentar sembrarlas después.
Su caso se replica en más sectores de Manabí, Guayas, El Oro, Los Ríos, Loja y de otras provincias donde la prolongada sequía no solo ha dejado sin cosechas de arroz, maíz, soya y más productos a decenas de agricultores, sino también preocupación por sus deudas.
La estadística global aún está en fase de recolección en el Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap), pero en Manabí ya se contabilizan 34 mil hectáreas de cultivos de ciclo corto perdidas, mientras que en Los Ríos se estima que es el 60% de 85 mil hectáreas de arroz sembradas, y el 40% de 125 mil ha de maíz.
“Esto es peste. Hace días sacamos (al campo) al Divino Niño y le encargamos que traiga lluvia, pero no cae”, expresa fiel a sus creencias Teodoro Morán, de la cooperativa 22 de Mayo del recinto Pica Pica, en el cantón Baba (Los Ríos), quien perdió sus dos cuadras de arroz.
El denominador común, además de la evidente sequedad de la tierra, la maleza que gana espacio entre los cultivos y su aspecto quemado, es la falta de sistemas de riego o de infraestructuras para irrigar, constató este Diario en un recorrido por recintos afectados. En zonas bajas o en las que hay canales cercanos el panorama es diferente, pues cuentan con reservas de líquido para superar la situación, explica Manuel Carriel, dirigente del Centro Agrícola de Urdaneta (Los Ríos).
En materia de riego, los organismos responsables de liderar acciones y su manejo son la Secretaría Nacional del Agua (Senagua) y el Instituto Nacional de Riego (INAR), ahora Subsecretaría de Riego y Drenaje; sin embargo, la competencia que otorga la Constitución a los Consejos Provinciales para administrar esos sistemas mantiene en transición la ejecución de obras en ellos y decisiones.
Un Reporte Situacional de Déficit Hídrico elaborado el 24 de marzo por la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR), tras una inspección en Babahoyo y Urdaneta, da cuenta de la necesidad de declarar en emergencia a Los Ríos, y de que se ejecuten obras del proyecto Cedegé (entidad absorbida por la Senagua, vía decreto en septiembre del 2009), cuyos estudios datan de 1972.
Estas comprenden una represa y canales para irrigar unas 4.000 hectáreas con las aguas del río Cristal.
También menciona que se requiere implementar infraestructura faltante (canales secundarios y terciarios) en el proyecto de riego Catarama, para regar 7.000 ha, como fue concebida esa obra en 1990, lo cual no ocurre; así como la construcción de pozos para pequeños productores y de albarradas para reservar agua.
Muestra de esa realidad está en el recinto Versalles, del cantón Baba, donde las plantaciones de Rubén Medina dependen únicamente de la lluvia. Aunque él invirtió recientemente parte de un crédito en la construcción de un pozo, no cuenta con una bomba para extraer el agua y regar su arroz, el cual ya se perdió. “Comprar una (bomba) sale caro. De la cosecha quería reunir (dinero), pero ya no se pudo”, dice, mientras su hijo Ronny riega unas matas de cacao que espera salvar. Lo hace con un balde, el cual llena en una poza de la que beben agua unos cuantos caballos.
Sobre la sequía en los cantones Arenillas, Balsas, Chilla, El Guabo, Las Lajas, Machala, Marcabelí, Piñas, Santa Rosa y Zaruma, en El Oro, la SNGR alertó de la pérdida progresiva de cultivos de ciclo corto, como maíz, arroz, fréjol, limón, frutales, café, banano, cacao y pasto. “Al momento se cuantifican 10.105,5 hectáreas afectadas y 539 hectáreas perdidas de cultivos, así como ganado de carne y leche afectado por bajo peso”, señala, al tiempo de recomendar, entre otras cosas, la dotación de bombas de succión, semilla, melaza, aminoácidos, la limpieza y construcción de pozos y canales de drenaje para reservar y transportar agua.
La situación tiende a no mejorar. Según Fabián Salas, meteorólogo del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), “no hay condiciones de lluvias en el Litoral para los próximos cinco días, exceptuando quizás el interior de Los Ríos, en las zonas montañosas”, informó el viernes.
Mediciones históricas del Inamhi revelan que en ciudades como Portoviejo, lo normal es que en marzo caigan 126,6 milímetros de agua en promedio; sin embargo, en lo que va del mes se han registrado 13,1 milímetros. Algo similar se constata en Quevedo, donde hasta el viernes pasado se contaban 104,3 milímetros, siendo el promedio normal 435,2 milímetros; y en Salinas, que debería sumar 62 milímetros, pero está en cero. No ha llovido.
A Gustavo Mosquera, agricultor del sector Hierbaluisa del cantón Palenque, Los Ríos, lo que le preocupa es el crédito de $ 6.000 que hizo en el Banco Nacional del Fomento (BNF) para sembrar 18 hectáreas de maíz y tres cuadras de arroz, pues perdió casi toda su siembra. Además, se endeudó “por otro lado” con $ 2.500 para comprar insumos. El martes pasado esperaba la visita de un técnico del BNF al que comentó su situación en busca de refinanciar su deuda.
Apuntes: En el campo
Manabí
Agricultores consultados indicaron que en Manabí, maíz y arroz son los cultivos más afectados por la sequía, en Jipijapa, Tosagua, Junín, Portoviejo; se suman melón y sandía, en Portoviejo y Chone.
Los Ríos y El Oro
En Los Ríos, el ganado está afectado en Vinces y Baba; en Palenque, ganado y maíz; y en Puebloviejo y Ventanas, el maíz. En El Oro se cuentan maíz, maracuyá, pimiento y fréjol, en Arenillas, Huaquillas, Santa Rosa y Las Lajas; y ganado en Portovelo, Zaruma, y Chilla.
Azuay y Loja
Cacao, caña de azúcar y banano presentan problemas en Camilo Ponce Enríquez; maíz, fréjol y manzana, en Gualaceo; y maíz y fréjol, en Cuenca, en Azuay. En el sur de Loja está afectado el maíz y la cebolla en Saraguro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario