domingo, 9 de septiembre de 2012

Los accidentes siguen pese a las sanciones

***SNN






MUERTES. Las carreteras del país se llenan de sangre a causa de los accidentes de tránsito.           


"Accidentes no han disminuido y la siniestralidad no se reduce”.

Víctor Jiménez,

de la Comisión Interinstitucional de Educación, Seguridad y Prevención Vial (Covial).


"El Estado les premia y es complaciente (con los choferes)”.

Guillermo Abad
Justicia Vial.


"No estamos pidiendo que nos exoneren (sanciones), sino que por las condiciones económicas, nos permitan pagar en partes”.

José Santamaría
presidente de la Cámara de Transportistas.



La semana anterior fue una de las más trágicas en El Oro. Dos accidentes registrados el jueves 23 y el domingo 26 de agosto dejaron 19 muertos y 32 heridos.



Los hechos acontecieron en la misma ruta desde Pasaje a Chilla, Abañín, Uzchcurrumi y Guanazán, donde entre el 2007 y 2012 se han producido cinco accidentes de tránsito con saldo de 35 fallecidos.

El transporte interprovincial representa apenas el 12% del parque automotor del país, sin embargo, está inmerso en el 48% de accidentes de tránsito.

Según las cifras de la Dirección Nacional de Tránsito (DNT) de la Policía Nacional (exceptuando los datos de Guayas, Santa Elena y Los Ríos que pertenecen a la Comisión de Tránsito del Ecuador –CTE-), entre enero y el 23 de agosto de este año, los buses han estado involucrados en 992 accidentes, mientras que los conductores de automóviles livianos han provocado 2.034 siniestros, las camionetas 1.329 y las motocicletas, 992.
Estas mismas estadísticas señalan una disminución de la accidentalidad; mientras entre enero y mayo de 2011 se registraron 24.626 siniestro, en el mismo periodo del 2012 la cifra alcanzó los 9.764 (ver recuadro).

“Esto reflejaría que sí ha dado resultado la aplicación de la Ley de Tránsito y su reglamento, y los operativos que realiza la Policía Nacional”, señala Luis Espinosa, perito del Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT).
MortalidadLa impericia o imprudencia de los conductores es la principal causa de accidentes, después están conducir en estado de embriaguez y por exceso de velocidad, aunque también se registran casos en los que la culpa la tienen los no conductores.
Sin embargo, en la mayoría de los casos de accidentes fatales se ha evidenciado errores de los conductores. “Todos somos responsables”, aseveró Jiménez.

La preocupación es que la mortalidad y morbilidad continúan siendo altas, porque en lo que va del año, según la DNT, hubo cinco siniestros, pero son tan graves que hasta han muerto 30 personas en un solo accidente, el que ocurrió en Ibarra.
En 2011 (entre enero y agosto), se registraron 9 mil 487 víctimas (heridos, traumáticos y muertos) y en este año, en el mismo período, hubo 8 mil 291 casos. Pero, según Espinosa, en 2011 el número de accidentes graves, es decir, de alta fatalidad, fueron dos, pero este año van cinco: en San Lorenzo, Papallacta, Riobamba, Chone y Chilla.
“Con tantos accidentes que se escucha, uno se pone a pensar si uno va seguro con el chofer, con el carro, si estará bien la vía. Obvio, me da temor”, contó Eduardo Padilla (33 años), quien viaja desde Esmeraldas a la capital cada mes. Él fue testigo de un siniestro y se salvó de morir.
“Estaba esperando el bus y pasó uno que no se detuvo. Me subí en el siguiente. Después en la carretera había congestión, así que me bajé a comprar algo. En ese momento vi cómo sacaban a una señora de trenzas que estaba muerta, era la misma que yo había visto antes. Era el bus que no me paró”, expresó.
Vías más peligrosasHasta mayo de este año, a nivel nacional se han producido 9.764 accidentes según la Agencia Nacional de Tránsito (ANT). De esos, 2.375 se dieron en Guayas, 1.236 en Pichincha y 485 en Manabí.

“En promedio, Guayas y Pichincha se llevan el 60% de los siniestros del país”, señaló Guillermo Abad, de Justicia Vial, quien asegura que las carreteras más peligrosas todavía siguen siendo la Alóag-Santo Domingo, Papallacta y Santo Domingo-Quevedo.

Por otro lado, el tipo más frecuente de accidente es el choque, que en este año, alcanzó el 43.67%, es decir, 4 mil 264 siniestros. A este le sigue los atropellamientos, con el 17.09% que corresponde a 1.669 casos.
El número de víctimas subió a 19, luego de fallecer una señora.



Minuciosa revisión

° Mauricio Peña, director de la Agencia Nacional de Tránsito, en su visita a Machala realizada el martes último, dijo que las unidades de la cooperativa Transchilla serán sometidas a una rigurosa revisión en los centros especializados de Cuenca, a fin de garantizar a la ciudadanía que las unidades que prestan el servicio estén en adecuadas condiciones.


En cuanto a la señalización en la vía Chilla, dijo que se harán estudios que permitan atender de forma inmediata, pues, al existir los informes de problemas climáticos, a este cantón se lo tratará con un plan prioritario ubicando la señalética en los sectores más críticos.

Por otra parte, los 107 choferes de la Cooperativa Carlos Alberto Aray, con sede en Chone-Manabí, también están siendo evaluados tras un nuevo accidente producido por el bus disco 24, el pasado 30 de julio, donde fallecieron cuatro personas.



1.000’000.000
de dólares le costarán aproximadamente al Estado los accidentes de tránsito en este año.

13
muertes diarias en promedio se producen por accidentes de tránsito.

139
heridos resultan por siniestros de tránsito.

6.238 personas han sido sancionadas por exceso de velocidad.




Transportistas. La clase del volante ha sabido aliarse con el Gobierno.

Choferes obtienen beneficios del Estado

Durante este Gobierno los transportistas han recibido beneficios del Estado para que no incrementen los precios de los pasajes y hasta se les ha permitido recuperar los puntos perdidos en sus licencias.


Para Guillermo Abad, de Justicia Vial, el “Estado les premia y es complaciente”, a pesar del alto número de accidentes y mortad producida por el transporte interprovincial.
En mayo último, la Federación Nacional de Cooperativas de Transporte Interprovincial de Pasajeros (Fenacotip) firmó un acuerdo con el Gobierno en el que se estipula un subsidio de 800 dólares mensuales por cada bus interprovincial y de 350 que para el transporte urbano, indicó el presidente de la Cámara de Transportistas, José Santamaría. Es decir que el Estado deberá cancelar alrededor de 4,6 millones de dólares mensuales por las 5.800 unidades de transporte interprovincial que cubren las diferentes rutas en el país. La medida se debe aplicar, según el convenio, de manera retroactiva desde octubre de 2011. Así, al año se llegaría a los 55,6 millones, además del valor que tiene que cubrir por los accidentes de tránsito que se producen.
Según las estimaciones de Justicia Vial, en 2006 el Gobierno tuvo que pagar alrededor de 576 millones de dólares para cubrir los gastos de tratamientos de víctimas de accidentes, su falta de productividad, los procesos legales, entre otros. Pero, para este año, se calcula que ese valor se incremente a aproximadamente mil millones de dólares.
Además, los transportistas tienen la posibilidad de pagar por partes la cantidad adeudada por sanciones de tránsito, que en algunos casos alcanza los 900 dólares, para así poder acceder a los cursos de recuperación de puntos. Pero, Santamaría criticó que se cuestione la resolución porque “no estamos pidiendo que nos exoneren, sino que por las condiciones económicas, nos permitan pagar en partes”. También existe la alternativa de realizar ‘cursos intensivos’ para la obtención de la licencia profesional, en menor tiempo. Finalmente, también existe una exención de impuestos para la importación de neumáticos. Los transportistas no tienen que pagar el gravamen de ingreso de los bienes en la aduana, solo tienen que cancelar el Impuesto al Valor Agregado (IVA).


Cómo obtener la licencia profesional
° Licencia profesional tipo C, primera vez: seguir el curso que puede tomar alrededor de seis meses y cuesta aproximadamente 900 dólares. Aprobado el curso se debe presentar: Original de cédula de ciudadanía y de certificado de votación, una fotografía a color actualizada tamaño carné, original de permiso de aprendizaje Tipo C, original y copia del título de conductor profesional Tipo C, original del certificado o carné del tipo sanguíneo de institutos avalados por el Ministerio de Salud y aprobar los exámenes psicosensométricos.
° Renovación por caducidad de licencia C, D, E, G: se requiere original de licencia de conducir caducada, una fotografía a color actualizada tamaño carné, original de cédula de ciudadanía y certificado de votación, y aprobar los exámenes psicosensométricos y teóricos.

° Curso de recuperación de puntos: los conductores deben tener cero puntos en la licencia. Deben hacer un curso de 30 horas que cuesta 60.64 dólares.



Licencias fraudulentas, un problema que persiste

“He visto que en todos lados venden la licencia y compran. A pesar de que la ley prohíbe esto, se sigue dando”, contó Blanca Loachamin (34), quien está por graduarse del curso de un año en la Escuela de Choferes Profesionales de Pichincha. “Así se provocan accidentes y nosotros matamos por docenas”, criticó.
También Daniel Gualupa, quien tiene su licencia desde 2002 y maneja furgonetas, está en contra de quienes no obtienen legalmente el documento habilitante. “Es ‘un arma de doble filo’ porque las personas no tienen los conocimientos para poder maniobrar. Lastimosamente, por ciertas personas, quedamos mal vistos”, señaló.
Aproximadamente, 9.500 conductores han perdido la totalidad de los puntos de su licencia (30), según la ANT. Ellos deberán seguir el curso de recuperación de puntos para poder circular nuevamente. Sin embargo, como señaló el presidente de la Federación de Taxis de Pichincha en declaraciones a La Hora hace tres semanas, continúan en las calles: “como no hay control siguen trabajando”.
Además, Guillermo Abad denunció que los cursos intensivos para obtener la licencia, son “anti técnicos e ilegales”. Esto porque entre 2008 y 2010 no hubo más de 3.000 alumnos, pero en cinco meses, entre septiembre 2011 y febrero 2012, se graduaron más de 30.000 personas. “Es un camuflaje para la entrega de títulos profesionales sobre la ley”, señaló.
Igualmente, se registró en una asociación de Babahoyo, que durante un campeonato de fútbol, antes de terminar los cursos, se ofrecía a los ganadores la exoneración del examen práctico y al resto se entregaban jabas de cerveza.
15

conductores diarios en promedio pierden todos los puntos de la licencia.

Velocidad. Por todo el país se han instalado fotorradares para sancionar aa los conductores que excedan los l?mites de velocidad.

Pululan sanciones por límite de velocidad

La Ley de Tránsito y su reglamento impone sanciones de prisión, multas basadas en la remuneración básica de un trabajador y pérdida de puntos en las licencias, imposiciones que dependen de la gravedad de la infracción cometida.

 “Con la ley se hace sufrir a los que están en desorden”. Así piensa Miguel Betancourt, profesor de filosofía de Esmeraldas, que semanalmente viaja a Quito. Desde la aplicación del reglamento a la Ley de Tránsito, él se siente más seguro y tranquilo. “Ahora van mucho más despacio. Antes había movimientos bruscos, porque tenían que frenar, porque cogían mal una curva”, contó.
Sin embargo, no todas las infracciones se sancionan y muchas no son drásticas, como denunciaron Jiménez y Abad. Los choferes se dan a la fuga cuando provocan accidentes fatales, siendo ahora considerados como ‘Los más buscados’ por el Ministerio del Interior. Los dos coinciden en que el problema no es la existencia o falta de normativa, sino su cumplimiento desde todos los actores: conductores, pasajeros, peatones y autoridades. “Todos los usuarios somos los responsables por los índices de mortalidad y morbilidad porque somos el 95% de los causantes de los accidentes”, indicó Jiménez, quien recalcó que “no se está sancionando con todo el rigor de la ley”. Abad considera que “todo dependerá de la autoridad que debe hacer cumplir la ley”, lo que implicaría también aumentar los operativos y mejorar los controles. “No deben ser complacientes”, recalcó. Los operativos son de todo tipo y se realizan en base a estudios de los puntos de mayor accidentabilidad, donde se colocan los fotoradares, y también los de mayor afluencia de personas, para controlar el nivel de alcohol de los conductores. El problema, según Espinosa, es la falta de conciencia vial porque existen mecanismos para cumplir las normas.



Disposiciones
Límites de velocidad

Vehículos livianos:
a) Dentro del perímetro urbano: 50 k/h;
b) En vías perimetrales: 90 k/h; y,
c) En carretera: 100 k/h.
Vehículos de transporte público y comercial de pasajeros: a) Dentro del perímetro urbano: 40 k/h;
b) En vías perimetrales: 70 k/h; y,
c) En carretera: 90 k/h. 
Vehículos de transporte de carga, en carretera: a) Camiones pesados y combinaciones de camión remolque, el límite de velocidad es de 70 k/h.
b) Vehículos que remolquen acoplados u otros automotores, el límite de velocidad es de 50 k/h.

Motocicletas y similares: a) Dentro del perímetro urbano: 50 k/h;
b) En vías perimetrales: 90 k/h; y,
c) En carretera: 100 k/h.




Fuente: LA HORA*



 

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