EXPRESO
Los ejemplares fueron incautados en la vía Durán-Tambo y horas después se los reinsertó en la reserva Manglares del Salado, a cargo del Ministerio del Ambiente.
Foto: Juan Carlos Holguín/Expreso
Decomiso. Autoridades policiales y ambientales hicieron un control durante el primer día de la veda.
Para la reinserción efectuaron un viaje de dos horas en canoa por el estero.
El recorrido partió desde el balneario de Puerto Hondo, en el kilómetro 16 de la vía a la costa. Bajo un sol canicular, a las 12:30 del pasado sábado, tres miembros de la Unidad de Protección del Medio Ambiente de la Policía Nacional (UPMA) y dos funcionarios del Ministerio del Ambiente y la Subsecretaría de Recursos Pesqueros (SRP) se embarcaron en dos canoas llevando un singular cargamento: 70 planchas de cangrejo, con un total de 3.360 animales.
El destino: la reserva Manglares del Salado, área a cargo de Ambiente. En un viaje de dos horas, las autoridades ingresaron hasta los manglares y liberaron los crustáceos que habían sido decomisados durante un operativo en el mercado de mariscos de Durán, en la vía Durán-Tambo, donde los comercializaban pese a estar vigente la temporada de veda.
Las embarcaciones iban repletas de crustáceos, que todavía estaban atados en planchas.
En dos puntos del estero los gendarmes y los funcionarios cortaron las sogas que aseguraban los animales y efectuaron la tarea de reinsertar a los cangrejos en su hábitat natural.
Al principio tomaban grupos de 8 ó 10 animales y los dejaban caer poco a poco al agua. Pero debido a su gran número, al final los encargados del procedimiento cortaron las amarras y los dejaron libres dentro de las embarcaciones. Algunos cangrejos subieron por la madera y cayeron al agua por sus propios medios. Otros fueron depositados por las autoridades, que no pudieron evitar ser alcanzados en repetidas ocasiones por las fuertes tenazas de los cangrejos.
Poco a poco esta parte del estero se llenó de nuevo con los miles de ejemplares de la especie, cuya venta está prohibida durante el mes de veda, que comenzó a partir de la medianoche del pasado viernes y durará hasta la medianoche del martes 15 de febrero.
En el operativo de incautación, cumplido desde las 10:00 hasta las 12:00, participó también Conservación Internacional, que colabora con la UPMA. Según el teniente Denis Novillos, jefe de la Policía Ambiental en Guayas, los comerciantes de cangrejos que estaban vendiendo los animalitos argumentaron que no se les ha comunicado en forma oportuna sobre la veda. “Pero ellos tienen conocimiento de los dos periodos: 15 de enero a 15 de febrero y 15 de agosto al 15 de septiembre. Cada año son los mismos lapsos”.
El oficial señaló que este mes es el periodo de reproducción del animal y con la veda se respeta el ciclo natural, para permitir el apareamiento y así, luego de la veda, continuar con el consumo normal. “Si no se respeta la ley, no se le da al animal el período para su reproducción. Estaríamos exterminando este crustáceo”.
Por ello, dijo, los operativos de control para prevenir la comercialización ilegal de cangrejos serán constantes y en diferentes horarios. La Policía, en acuerdo con la Subsecretaría de Pesca del Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca (Magap), no detendrá a la persona si se le encuentran cantidades mínimas del crustáceo, como 3 o 4 planchas. “Solo procederemos al decomiso”, manifestó Novillos.
Por ello en el operativo del sábado no hubo personas privadas de la libertad. Pero si el vendedor posee una cantidad considerable, será un delito contra el ambiente y el caso pasará a órdenes de la Fiscalía para el respectivo proceso penal.
Según el técnico Juan Marengo Peñafiel, líder de inspectores de la Subsecretaría de Recursos Pesqueros, en las planchas decomisadas habían cangrejos “bastante pequeños, sin el diámetro necesario para ser consumidos. El tamaño mínimo es 6 centímetros en el cefalotórax (parte central) y muchos tenían menos que eso”. También hallaron animales con las tenazas mutiladas y que recién las estaban regenerando.
De igual forma, habían algunos muertos. “Esto es normal debido a la manipulación durante el proceso de captura y traslado hasta el mercado, además del intenso calor. Pero un 80% del total decomisado estaba con vida”.
El experto recordó también que desde el domingo 16 de enero está en vigencia la veda de la langosta. Este periodo se extiende hasta el 16 de junio, lapso en el que está prohibida la captura, tenencia, procesamiento, transporte y comercialización interna y externa de este crustáceo.
Como en el caso del cangrejo, la veda es para proteger la especie durante su etapa de reproducción. Fuentes de la SRP explicaron que en Ecuador, el consumo indiscriminado de langosta en temporada de veda ha originado la reducción del tamaño de la especie. De 27,5 centímetros en 1971, pasó a 19,5 en 2001 (ver gráfico).
Esto es causado porque los pescadores capturan cualquier ejemplar, sin importar que sean hembras ovadas o individuos de tamaño menor al permitido (26 cms de longitud total), con lo que interrumpen el ciclo natural del animal.
La SRP recordó que entre enero y junio, además del cangrejo y la langosta, existen dos vedas más vigentes. Una es la del recurso chuhueco (Cetengraulis mysticetus), del 1 de enero al 30 de junio. Esta especie no alcanza más de 18 centímetros de longitud total, es pelágico costera y se le conoce como anchoveta del Pacífico.
La otra veda es la de especies bioacuáticas en la provincia de Los Ríos, del 10 de enero al 10 de marzo.
Las autoridades hicieron un llamado a la comunidad para que respete la veda y así evite el comercio ilegal de cangrejo y langosta. Para denuncias comunicarse al 101 (Policía Nacional), 6018594 (UPMA) y 2561489 ext. 303 (SRP Guayaquil).
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