sábado, 29 de enero de 2011

Acantilados y bosques en Manta

***SNN

Redacción Manta
ecuador@elcomercio.com


Al filo del acantilado de San Lorenzo. Estudiantes de los colegios Julio Pieregrosse y Manabí visitaron el faro de San Lorenzo. Foto: Patricio Ramos/EL COMERCIO


turismo | Manabí es para disfrutarlo turísticamente en todos sus rincones. Para muestra, un ejemplo: a 30 minutos al suroeste de Manta conjuga la vegetación de bosque seco, húmedo, acantilados y amplias playas.


Recorrer senderos en medio del bosque primario de Pacoche de 13 000 hectáreas y el perfil del acantilado de San Lorenzo es una de las opciones en la temporada de playa en esta parte de Manabí.


Uno de los destinos está en la hostería Pacoche Lodge. En 10 de hectáreas de la reserva fueron edificadas dos cabañas. También existe un comedor que funciona como mirador y dos senderos en medio del bosque.


Carolina Toapanta es la guía del lugar. Los recorridos al interior del monte para observar monos aulladores, bromelias, caña guadua, tagua y paja toquilla pueden durar entre 50 y 90 minutos.


Karolyn, Eduardo, Alejandro, Melissa y Víctor, estudiantes secundarios de los colegios Julio Pierregrosse y Manabí, de Manta, están de vacaciones. El pasado martes se reunieron para conocer las bellezas de Pacoche disfrutar de las playas y acantilados del sur de Manta.


El recorrido empieza en Pacoche Lodge. Por el sendero de 2200 metros se puede recorrer zonas de mediana y baja pendientes. Entre las copas de la caña guadúa y los guarumos (25 y 27 metros de altura), que se mecen por la fuerza de los vientos, 35 monos aulladores realizan sus acrobacias. Hay más de 300 de estos primates en todo el bosque.


El canto de la guacharaca, una ave en extinción que aún vive en Pacoche, acompaña a los visitantes. Transcurridos 90 minutos los caminantes hacen una pausa para beber agua en botella. El trayecto continúa hacia el sur.


La vía en medio del bosque serpentea en medio de guaduales y árboles de tagua. En cinco minutos queda al descubierto un impresionante paisaje.


Al fondo está San Lorenzo. Es un pueblo de pescadores artesanales. Allí hay tres hosterías. Antes de bañarse en el mar es aconsejable visitar el faro. Para llegar a la pintoresca lámpara, que guía la navegación de las embarcaciones en las noches y madrugadas, hay que caminar 30 minutos. Hay un sendero trazado al filo del acantilado. Las vistas panorámicas de los poblados del sur de Manta y el mar encantan a los visitantes.


Qué llevar


No olvide llevar protector solar. Los rayos pegan con fuerza en está época del año. En su mochila o bolso no puede faltar repelente para protegerse de las picaduras de mosquitos.


El agua en botella es indispensable para reponerse de la deshidratación por el recorrido por el bosque. No se olvide de guardar la botella en su bolso para no contaminar el ambiente.


No olvidar llevar cámaras fotográficas. Los paisajes marinos, el recorrido por el bosque y las caídas de sol en el interior del bosque son inigualables. El recorrido por los senderos del bosque Pacoche Lodge tiene un costo de USD 3.


Cómo llegar a Manta
 
Desde Quito, la opción es ir por la vía Alóag- Santo Domingo, o por Los Bancos hasta Santo Domingo. Luego continuar por la vía El Carmen-Flavio Alfaro-Chone-Tosagua-Rocafuerte-Manta. También puede viajar vía aérea en los aviones de Ícaro y Aerogal.


Hay ocho cooperativas de transporte terrestre que operan desde Quito hasta Manabí y viceversa. El pasaje promedio es entre USD 8 y USD 10.


Hospedaje


El costo del hospedaje en el interior del bosque Pacoche va desde USD 35 hasta USD 50. También se ofrecen platos típicos.


También hay habitaciones de USD 15 en San Mateo, Piedra Larga y Santa Marianita, que están cerca de la playa.


Se puede degustar platos de mariscos, camarones con patacones y ensaladas. El infaltable cebiche de pescado a USD 4.


Qué hacer


Se puede visitar el sitio El Aromo donde se proyecta la construcción de la Refinería del Pacífico.


En la hostería hacienda San Antonio existe un pequeño zoológico en el interior del bosque.


También se puede visitar la isla de La Plata. Los pescadores artesanales lo llevan en sus lanchas en 40 minutos al macizo que se ve desde el faro de San Lorenzo. El costo USD 45, por cinco personas.

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