Los ciudadanos de 25 países y organismos sociales se unieron a la campaña ecuatoriana que busca concienciar al planeta de la contaminación dejada por la petrolera Chevron en la Amazonía de Ecuador.El Gobierno del Presidente, Rafael Correa, lanzó la campaña ‘La mano sucia de Chevron, para crear una cadena planetaria de ciudadanos y organizaciones sociales y que ellos sean los voceros de este daño ambiental sin igual en la historia.
Este apoyo es clave. Actualmente, en países de América, Europa. Asia y África (ver mapa) se han creado comités ciudadanos de apoyo al Ecuador y de rechazo a la estrategia de desprestigio que la transnacional emprendió contra el país.
Los ciudadanos de esas naciones y compatriotas residentes han organizado plantones y protestas para denunciar los problemas que aún viven las comunidades indígenas de Sucumbíos y de Orellana. También elevan su voz para exigir que esos daños no queden en la impunidad.
Los encuentros más importantes se realizaron en París, Madrid, Caracas, Asunción, Bogotá y otras ciudades del mundo.
Ecuador también ha recibido el respaldo de organizaciones regionales y continentales, como la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur); de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de América (Alba), del Parlamento Latinoamericano, y del Parlamento Europeo.
Estos organismos emitieron resoluciones para condenar la campaña de desprestigio que lleva adelante la poderosa transnacional en contra del Ecuador y sus gobernantes.
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A esta campaña también se sumaron figuras como el actor Danny Glover; la cantante y actriz estadounidense Cher; el cantautor español Luis Eduardo Aute; la defensora de los derechos humanos, Blanca Jagger, y más personalidades reconocidas en el mundo por su trabajo a favor de los derechos fundamentales.
Chevron no acepta la sentencia que ordena el pago de 9 500 millones de dólares, como compensación de la contaminación en la Amazonía. Esa fue la condena que se estableció dentro de un juicio que cumplió dos décadas de trámite.
Para la petrolera estadounidense, esos daños son responsabilidad del Estado ecuatoriano y por eso su Gobierno debe pagar esa millonaria reparación.
Para propagar su criterio Chevron no escatima gastos en la contratación de abogados y medios de comunicación de varios países.
Ante esta lucha desigual, es vital mostrar la verdad, que es la única arma del Ecuador frente al poder que despilfarra Chevron.
Esta lucha, dice el Presidente Correa, es para concienciar que el capital no debe estar sobre el ser humano, aunque parezca una utopía
Fuente: EL CIUDADANO
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