Originales, nutritivos y deliciosos son los helados que prepara en su hogar desde hace dos años Luis Ordóñez.Con puro ingenio montó su pequeño negocio ambulante, pues le tocó dejar su tierra, Colombia, desde hace 10 años. “Me vine a Ecuador porque en mi país hay mucha violencia y delincuencia”, comentó.
Cuando llegó a Quito se dio cuenta que el mercado de los helados estaba saturado, pero su gran capacidad de crear lo llevó a inventar nuevos sabores.
Como no tiene capital para invertir en publicidad, la única forma de dar a conocer sus productos es utilizando su voz.
“Helados de chocho y banano, remolacha y mora, yuca y queso, mango verde con sal”, va gritando por las diferentes facultades de la Universidad Central, que es el único sitio donde trabaja.
Al escucharlo, varios estudiantes, profesores y transeúntes lo regresan a ver admirados.
“Muchos piensan que me estoy burlando o que miento y no tengo esos sabores”, dice Luis entre risas. Una vez que los curiosos compradores se acercan, es difícil decidir cuál será el mejor sabor para probar.
“Algunas personas tienen recelo de probar. Claro, como no se ha escuchado estos sabores, ellos tienen razón”, explicó.
GRAN VARIEDAD
Luis empezó con su negocio hace dos años. “Me di cuenta que en Quito no vendían helado de mango verde con sal y eso en mi tierra es muy común. Así que decidí arriesgarme y me fue bien”, manifestó.
Luego empezó a producir helados de coco, borojó y otras frutas, pero su curiosidad lo llevó a mezclar algunos sabores.
“Un día me puse a combinar ingredientes y ver qué tal sabor tenían y así cada vez voy creando más y más señaló”.
Para el helado de yuca debe cocinarla muy bien, para posteriormente licuarla con algunas especies secretas y colocarle leche. “Para que no haya solo yuca, rallo unos trocitos de queso y finalmente coloco en la punta dulce de guayaba”, dijo.
En cambio, para el helado de chocho, licúa el choco y le agrega canela, para después colocar el guineo batido, más la leche.
“Hay que saber colocar la cantidad exacta de cada cosa para que no quede un mal sabor”, señaló.
El chocho no es pelado, pues según Luis en la cáscara está el alimento. “Yo estoy seguro que mi producto es muy nutritivo”, comentó. El helado de remolacha es muy fácil de elaborar, pues solo se debe licuar la mora y la remolacha para conseguir una combinación perfecta de sabor.
A diario, Luis produce unos 70 helados y los lleva consigo en una caja que los mantiene fríos.
“Gracias a mi esposa que me ayuda a picar algunas frutas, llego a la casa y elaboro rápidamente los helados”, indicó.
Fuente: EXTRA
me puede dar la receta
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