viernes, 18 de enero de 2013

El pasado ya pasó: Cómo cubrir una aburrida campaña electoral

***SNN

 
 

 

elecciones


por rubendariobuitron


1. Tener conciencia de que realmente es aburrida esta campaña electoral porque es como ir a ver una competencia hípica en la que todos los asistentes saben cuál es el favorito y en qué puesto llegará.


2. Entender por qué es aburrida. Opciones:


2.1. Ya lo dijimos. Todos saben (unos con alegría y otros con resignación) quién ganará.


2.2. El probable ganador tiene todo a su favor.


2.3. Todas las encuestas dicen que el probable ganador será, sin duda, el probable ganador.


2.4. Las campañas de los otros candidatos son intrascendentes.


2.5. Los otros candidatos prometen exactamente lo mismo que hace años ya está haciendo el probable ganador.


3. Analizar las estrategias de campaña de cada uno de los rivales del probable ganador, si en verdad tienen alguna estrategia.


4. Observar cómo la mayoría de probables candidatos perdedores sigue pensando que una campaña electoral en el 2013 (siglo XXI) es igual a cualquiera de las décadas pasadas (siglo XX).


5. Interpretar los discursos de los probables perdedores desde su incapacidad de ser una alternativa trascendente y concreta al probable ganador.


6. Identificar por qué los probables perdedores no son capaces de articular un discurso distinto o tan original que convoque, interese, sorprenda y llame la atención de los votantes.


7. Estudiar lo que ha pasado con la política nacional en estos últimos siete años, cómo ha evolucionado, qué nuevos actores existen, quiénes protagonizan el movimiento de la sociedad, qué es lo que diferencia a la actual época con la anterior, por qué parece (y es) tan difícil al menos acercarse al probable ganador en las intenciones de voto y en las encuestas.


8. Comprender el cambio que han tenido conceptos como poder, elecciones, prensa, democracia, representación, ciudadanía, cuarto poder, gobernabilidad, funciones del Estado, derechos…


9. Elaborar periodísticamente un manual para perder las elecciones sobre la base de lo que están haciendo los probables derrotados.


10. Dejar de elucubrar o hacer hipótesis inútiles y salir a las calles, recorrer las provincias, caminar las ciudades, escuchar y sentir y aprehender el país que la gente demanda de quien espera sea su presidente.


11. Escribir sobre ese aprendizaje y provocar una reflexión de la sociedad.


12. Entender que no es la campaña lo que resulta aburrida, sino quienes la hacen sin ningún encanto, sin ningún carisma, sin ningún contenido que entusiasme y despierte (en el poco tiempo que falta) no al electorado sino a ellos mismos, a los probables candidatos perdedores, incapaces de entender que el pasado ya pasó y que su estrategia debió estar pensada en un futuro que realmente enfuture.



 

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