Las gabarras de Bahía pasarán a otras zonas

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EL UNIVERSO - Xavier Ramos SUCRE, Manabí
BAHÍA DE CARÁQUEZ, Manabí. Dos gabarras administradas por la Armada ofrecen traslados en el estuario del río Chone, desde hace dos décadas, pero el servicio llegará a su fin con el funcionamiento del puente entre esta localidad y San Vicente.

A días de la apertura del puente más largo del país, escenas características sobre el estuario del río Chone quedarán para la historia; entre ellas, las que dibujan las gabarras repletas de vehículos o las que llevan desde camarones hasta ganado, todo entre las orillas de Bahía de Caráquez y San Vicente, en la costa central manabita.

Este servicio que cumplen dos embarcaciones administradas por la Armada del Ecuador desde hace veinte años, se suspenderá cuando esté operativo el viaducto, cuya inauguración se prevé para el 29 de octubre próximo, aunque se espera que el presidente Rafael Correa defina el día exacto para el acto.

El puente eliminará las largas filas con esperas de hasta cinco horas, que los usuarios aún realizan en días de alta demanda -como fines de semana o feriados- para cruzar con sus carros de una orilla a otra. El recorrido dura treinta minutos.

Entre tanto, se analiza cuál será el futuro de las gabarras. El capitán del puerto en Bahía de Caráquez, Ricardo Díaz, afirma que el alcalde de Pedernales, Manuel Panezo, solicitó por escrito la donación de una de las unidades para dar servicio al sector turístico cuando dejen de funcionar entre Bahía y San Vicente. Pero para que una de las dos naves quede lista se necesita una inversión mínima de unos 500 mil dólares.

Ricardo Zambrano, gerente de proyectos viales en Manabí, afirma que hay distintas opciones en torno al uso futuro de las barcazas. “Si el servicio no se requiere en el tramo actual entonces se debe enviar a lugares donde exista la necesidad como el traslado entre Cojimíes y la isla al norte de Manabí o enviarlas a Esmeraldas”, explica.

Mientras, las gabarras siguen siendo parte del día a día en el estuario del río Chone. Carmen Mera esperaba cruzar la tarde del martes pasado con su camioneta doble cabina. Tuvo que aguardar dos horas para acceder a una de las gabarras y cruzar de Bahía a San Vicente. Para ella es casi una costumbre permanente desde hace tres años cuando adquirió su carro y se radicó junto a su familia en San Vicente, ya que su esposo trabaja en Pedernales.

Un promedio de doce carros livianos puede ser llevado de una orilla a otra. La espera mínima para acceder al servicio es de una hora. Algunos conductores que viajaban de Pedernales a Bahía de Caráquez tenían la costumbre de llamar a sus familiares o conocidos en San Vicente para que un taxista se ponga en la fila y así reducir el tiempo de espera.

Se estima que unos 200 automotores entre vehículos y camiones se transportan como mínimo a diario entre las dos orillas, según la Capitanía del Puerto de Bahía de Caráquez, ente que se encarga de administrar ambas gabarras.

El servicio se ofrece desde las 06:00 hasta las 22:00, aunque cuando la marea baja se suspende ante la imposibilidad de realizar el recorrido debido a la acumulación de sedimentos en áreas del lecho del estuario.

La comerciante Luisa Veloz considera que el puente es un gran avance, ya que facilitará el traslado de productos, aunque también cree que hará falta reforzar la seguridad. “Puede ser peligroso ya que los delincuentes podrán salir más rápido. Hasta el momento en Bahía es tranquilo”, refiere.

Los que sí consideran que tendrán menos clientes son algunos dueños de triciclos. Ellos solo pueden transportar personas dentro de la parroquia Bahía de Caráquez y su principal abanico de clientes se transporta desde la actual terminal provisional hasta el muelle para cruzar a San Vicente.

“La mayoría de personas ya va a cruzar por el puente por lo que no necesitarán trasladarse al muelle como ha sido todos estos años”, refiere Nicolás Vite, quien se dedica 15 de los 35 años que tiene a pedalear un triciclo para transportar personas.

El taxista Roberth Bazurto ya se prepara. “Creo que habrá más carreras. Pensamos cobrar cuatro dólares para llevar pasajeros del nuevo terminal de Bahía hasta la plaza de San Vicente pasando el puente”, cita.

Así, el servicio de las gabarras que fueron promocionadas como parte de la experiencia turística de visitar Bahía de Caráquez llegará a su fin.

Gabarras
La gabarra de Sucre tiene veinte años de servicio mientras que la de San Vicente, 17 años. Durante el 2009, la Armada invirtió unos $ 400 mil para mantenerlas operativas, mientras que se recaudaron unos $ 390 mil, por lo que hubo un déficit.