Noticia eldiario.com.ec
Opinión
Jorge Bello M. algranotv@yahoo.es Periodista
Para ésta generación, y más para los actuales representantes políticos, será vergonzoso y trágico que Manabí pierda La Manga del Cura. Allí habitan decenas de miles de seres humanos que sienten, piensan y tienen una opinión valedera y respetable.
Foto: SNN
Monseñor J. Mario Ruiz en visita a la Manga del Cura

Él lo hizo, sus gestiones contaban con la voluntad de los manabitas que mayoritariamente han colonizado esa región, luego de la expedición que abrió esa manga encabezada por el cura Pinto y la evangelización del padre Alberto Ferri.
A Ruiz le causaba malestar el desinterés de las autoridades manabitas de la época, alcanzaban a ver la trascendencia del tema y ponían menos empeño a este tema que a los apetecidos contratos de obras públicas. Hoy también debe estar desconcertado.
La historia está allí, los documentos son irrefutables a favor de la tesis manabita. Pero Manabí, a mi entender, perdió la primera batalla legal, de manera contundente. Con historia y documentos a favor, la Comisión Especial de Limites Internos de la República (CELIR) dictaminó que La Manga del Cura es “zona no delimitada” y por lo tanto recomienda una consulta popular, para que los pobladores decidan.
Puede tomarse como un lavatorio de manos o una solución democrática; pero también puede ser un primer triunfo de la tesis del Guayas, porque les da un respiro y les pone en un escenario en que ellos, con medios, recursos y experiencia, podrían inclinar los votos a su favor.
Renegar de la consulta y negarnos a esa vía de solución al diferendo territorial es negarse a la realidad, que además contaría con el beneplácito de la propia comunidad en litigio. Partiendo de ese pragmatismo, hay que definir estrategias validas y contundentes para no perder las siguientes batallas. Hay que pensar incluso en rebasar liderazgos dormidos.
Me temo que no hemos caído en cuenta en las inconsistencias de los datos poblacionales: el INEC y Guayas hablan de 20.000 habitantes; la Curia de Manabí, de sus datos y presencia permanente en todos los sitios y recintos, estima algo más de 160.000 habitantes, mientras que el Gobierno de Manabí cita algo más de 80.000.
Vital en el empadronamiento de votantes y el resultado de la consulta. No todo es maquinarias y obras, cuentan los votos y la credibilidad perdida por algunos mentirosos. ¡Imperdonable!
No hay comentarios:
Publicar un comentario