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Un nuevo reporte de posible negligencia médica se produjo este jueves en Quito, con la muerte de una niña de cuatro días de nacida tras, supuestamente, recibir una vacuna.


La familia Castro Díaz llevó a su hija recién nacida al centro de Salud Nro. 4 de Chimbacalle (sur de Quito), para la realización del tamizaje neonatal.


 La madre, Daniela Díaz, dijo que las enfermeras le informaron que primero había que aplicar la vacuna ECG. El tamizaje es un examen que sirve para detectar daños congénitos.

Según la progenitora, la niña murió luego de que se le aplicó la vacuna y ahora exige una sanción para los responsables.

La versión del jefe del centro de salud, Iván González, es diferente. Según él, la niña murió por un paro respiratorio generado por el ingreso de líquido a los pulmones. 

 
González, quien afirma que las enfermeras aplicaron el procedimiento correcto, dice que transcurrió un lapso de 40 minutos entre la aplicación de la ECG y la muerte de la niña. En ese período no se sabía dónde estaba la menor, quien habría vomitado sin que sus padres le brindaran ayuda oportuna.

La Policía Nacional trasladó el cuerpo para que el Departamento Legal de la institución realice la autopsia, cuyos resultados estarán listos el próximo jueves.




Fuente: EL COMERCIO*