Decenas de vehículos pesados ingresan y salen diariamente desde el Puerto Marítimo de Guayaquil. Foto: Pilar Vera / El Telégrafo
Los agentes constantemente recuperan grandes y valiosas cantidades de mercadería que son robadas en contenedores, por lo que preparan acciones encaminadas a detectar a las bandas y capturarlas.
Un contenedor de 40 pies y perteneciente a la naviera Hamburg Sud, cuya mercadería (aros de magnesio) estaba valorada en 37 mil dólares, fue sustraído, la noche del lunes anterior, por un grupo de delincuentes que se hizo pasar como miembros policiales.
Según la denuncia presentada por Juan Carlos Quelal Portillo, conductor del tráiler asaltado, alrededor de las 20:30, en las inmediaciones de la estación de Petrocomercial “Tres Bocas”, en la vía Perimetral, un grupo de sujetos quienes llevaban chalecos de la Policía Judicial del Guayas lo detuvieron y le indicaron que realizaban un operativo en busca de sustancias estupefacientes.
Inmediatamente, los sujetos, que según la denuncia eran alrededor de 10 y que se movilizaban en 4 vehículos, sometieron al conductor y a los guardias de seguridad, Juan Carlos Hurtado Salazar, Luis Enrique Poveda Valverde y Agustín Chilán Soledispa, apoderándose del pesado automotor.
Los perjudicados fueron abandonados cerca del tanque elevado de Interagua, en la misma autopista.
Ante el repunte de robos de contenedores, el jefe de la Policía Judicial del Guayas (PJ-G), Marcelo Tobar, informó que grupos de la unidad de inteligencia trabajan a lo largo de la avenida 25 de Julio, las vías Perimetral, Daule y a la costa, con el objetivo de detectar y desarticular las bandas de asaltantes. “No son muchas, son pocas, pero actúan en diferentes días y horas, y hacen presumir que son algunas.
Estamos trabajando en eso y ante lo cual el Distrito Metropolitano de Guayaquil está elaborando un plan de acción, pero no vamos a dar detalles por obvias razones”, dijo.
Al referirse a este tema, Orlando Jácome, jefe de Operaciones del Distrito Metropolitano de Guayaquil, señaló que tiene contemplada la creación de un grupo combinado de gendarmes (uniformados y civiles) para contrarrestar los delitos que causan alarma social, entre estos el robo de contenedores.
Jácome indicó que las vías antes mencionadas son las que, por lo general, los hampones utilizan para huir, después de perpetrar los atracos.
Fabián Villón, conductor de un tráiler de la compañía Yaesa, relató que, aunque no ha sido víctima de la delincuencia, conoce que varios de sus colegas sí lo han sido, como por ejemplo el suscitado en noviembre de 2010, cuando antisociales fingieron un operativo para robar una carga importante de atún.
Más de 60 toneladas de atún que eran trasladadas en cuatro tráilers, de la empresa Isabel, fueron robadas en el atraco cometido por un grupo de delincuentes que vestían uniformes de militares y vigilantes de tránsito.
El asalto ocurrió en el kilómetro 23 de la vía a Daule, cerca de las instalaciones de la empresa Unilever, alrededor de la medianoche.
“Una vez que los vehículos salen del Puerto empieza la travesía de uno. Circular por carreteras oscuras y desoladas es un peligro”, manifestó Villón, quien agregó que varias compañías se ven obligadas a invertir en tecnología o seguridad privada para precautelar la mercadería.
Un guardia, que prefirió no revelar su nombre, relató que hace un mes la concesionaria que administra el Puerto Marítimo de Guayaquil, Contecon, dispuso que ningún vehículo se estacione en las inmediaciones donde los tráilers y camiones son revisados por los agentes de seguridad de la terminal.
Ahora, a los vehículos se los ve a un costado de la avenida 25 de Julio. La medida, según los custodios, es para evitar que se filtre información de los cargamentos desde el interior del recinto portuario.
El control también se extiende a los sectores rurales de la provincia, donde en muchas ocasiones los asaltantes huyen con los botines sustraídos, indicó Carlos Aguirre, jefe de Policía del Guayas, ante lo cual se implementó un servicio de patrullaje exclusivo para las vías, denominado “Escuadrón de Carreteras”.
Las acciones se enfocarán, además, en el mal uso de los uniformes de la fuerza pública, que por su fácil acceso son empleados por personas inescrupulosas.
En abril pasado, este medio de comunicación denunció la venta informal de este tipo de vestimenta, por lo que las autoridades como la Intendencia General de la Pólicía, realizaron varios allanamientos y decomisos en locales, muchos de ellos asentados en los alrededores del cuartel Modelo.
Fuente: EL TELÉGRAFO*
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