Una mujer permaneció 33 horas herida en un barranco

***SNN




Ibarra. Los miembros del Cuerpo de Bomberos tardaron hora y media en rescatar a Ariana Narváez, que estuvo día y medio en una quebrada.


El conductor del vehículo, que cayó a 300 metros de profundidad, no logró salvarse


Una mujer de 26 años permaneció 33 horas a la intemperie, en un helado precipicio de aproximadamente 300 metros de profundidad, a donde cayó el domingo, durante un accidente de tránsito ocurrido en el sector Los Cañaverales, en el norte de Ibarra.


Ariana Narváez fue rescatada ayer, entre las 08:00 y 09:30, por quince miembros del Cuerpo de Bomberos de la capital de Imbabura.


Los socorristas tardaron hora y media en sacarla del fondo del barranco, en donde soportó la inclemencia del tiempo desde el domingo a las 23:00, cuando el vehículo Grand Vitara, color rojo, en que viajaba con Danilo Padilla (33 años) se volcara y cayera al precipicio, a escasos 200 metros del ex botadero de basura.


Un obrero de limpieza de la empresa Panavial, que realizaba el mantenimiento de la carretera, divisó al jeep en el fondo del barranco y fue quien avisó a sus superiores y estos al Cuerpo de Bomberos de Ibarra, cuyos rescatistas iniciaron inmediatamente la búsqueda y rescate de las víctimas.


Ariana Narváez contó que su amigo Danilo Padilla, quien conducía el vehículo, le pidió que lo acompañara a dejar a su padre en Santa de la Concepción, del cantón Mira (Carchi). Durante el retorno sufrieron el accidente en que perdió la vida. 


Ella cree que Danilo se quedó dormido porque minutos antes de que el carro se impactara contra la cuneta, diera vueltas de campana y cayera al vacío, le había dicho que tenía sueño.


Ariana recuerda que estar tendida sobre la maleza fue un verdadero calvario. No sabía si su amigo estaba vivo o muerto, pero que al no escuchar respuesta a sus llamados imaginó lo peor. Durante el primer día, después del accidente, no dejó de gritar, pero nadie la escuchó. 


Mantuvo la esperanza de ser rescatada con vida y, en su desesperación por salir, hizo pequeños huecos en la tierra para poder escalar, pero solo logró avanzar unos tres metros.


Durante las dos noches que pasó en el barranco se abrazó a su cuerpo para prodigarse calor y, durante el día soportó el azote del sol en su cuerpo. Incluso intentó cubrirse con las latas del destrozado vehículo, pero no pudo. "Quería que lloviera para tomar agua. 


Tenía mucha sed", relató la mujer, quien fue llevada al hospital San Vicente de Paúl, de Ibarra, pues sufrió politraumatismos, deshidratación y una deformidad en la pierna izquierda.


El bombero Fabián López presume que tiene una fractura en el fémur. "El intenso dolor impide a cualquier persona movilizarse", dijo.


El cabo primero Édison Sánchez, agente de la UIAT, presume que el conductor perdió el control del carro. Danilo Padilla fue encontrado a 30 metros de distancia de la mujer y presentaba signos de descomposición. El cadáver fue llevado a la morgue del hospital para que le practiquen la autopsia.




Fuente: DIARIO EXPRESO