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Cárcel número dos de Guayaquil, La Roca.
Las indagaciones para dar con el paradero de los cabecillas de una banda delictiva que supuestamente operaba en el litoral ecuatoriano duraron ocho meses. La pista principal para localizarlos fue la fuga de 18 internos de la cárcel número dos de Guayaquil, La Roca.
En las investigaciones, los agentes de la Policía Nacional determinaron que los sospechosos apresados manejaban la mayor red de sicarios en el país. Su nexo también consistía en facilitar el tráfico de drogas con el cartel mexicano de Sinaloa y las mafias colombianas de los Rastrojos y Urabeños. Estas dos últimas son investigadas por la Policía en el país junto a otra que se llama los Choneros.
A la banda desarticulada esta semana le atribuyen otros delitos: evasión, asociación ilícita, tenencia y porte ilegal de armas, según el Ministerio del Interior.
Además, un capitán en servicio activo de la Policía supuestamente mantenía las conexiones entre los “jefes de jefes” de estas mafias delictivas.
Con la desarticulación de esta red, ¿qué va a pasar con las operaciones del narcotráfico en el país? ¿se disminuirá el problema?
Para Daniel Pontón, catedrático de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), la captura de los líderes puede generar una “eclosión” de la organización. Esto quiere decir que la agrupación podría subdividirse en otras pequeñas que busquen abrirse espacio en el ámbito delictivo.
Pese a que el golpe afectó a la mafia que supuestamente operaba en el litoral ecuatoriano, no significa que el tema de la violencia y el narcotráfico disminuyan, agrega.
De su lado, Edwin Merlo, catedrático de la Escuela Superior de la Policía Nacional, señaló que la operación desplegada por la institución uniformada es “un duro golpe para las agrupaciones delictivas porque disminuirá su accionar”. Sin embargo, el experto añadió que no se puede calcular si esto afectará las operaciones de estos grupos en su totalidad.
Informes de Inteligencia también indican que los Choneros colaboraban con los Urabeños en las operaciones del narcotráfico, lo cual incluye los envíos estupefacientes al cartel de Sinaloa.
Además, el Ministerio del Interior precisó que el capitán policial detenido “está presuntamente vinculado a los Choneros”.
De igual forma, los Rastrojos colaboraban con esa agrupación mexicana. De hecho, uno de sus cargamentos fue decomisado en el 2009. Uno de los miembros de esta banda sería un militar retirado que se encuentra aprehendido.
Los Rastrojos Nexos con un militar retirado
Dos líderes de la banda delictiva Los Rastrojos han sido apresados en Ecuador en los dos últimos años. El último fue Jorge Domínguez, considerado por la Policía de Colombia como el cabecilla de la organización delictiva, vinculada en ese país con secuestros, asesinatos bajo la modalidad de sicariato y narcotráfico.
La alerta sobre su llegada al Ecuador provino del vecino país. “Utilizó una identidad falsa, con la cual avanzó hasta Manta (Manabí), desde donde tenía planeado asentarse para dirigir sus actividades ilícitas en Colombia. Para esto contaba con el apoyo de varios colaboradores en dicha ciudad”, informó el Ministerio del Interior.
Los Rastrojos se asentaron en el país hace al menos 3 años, según Inteligencia. El 16 de marzo del 2012, Juan Calle Serna, alias ‘Comba’, otro jefe de esta organización, fue apresado en un barrio residencial de Lumbisí (Cumbayá), en las periferias de la capital.
En las indagaciones, Inteligencia determinó que Calle consolidó a la organización delictiva en el país y absorbió las principales bases del narcotráfico. Montó un amplio control territorial del negocio ilícito y lavado de activos a través de empresas de fachada.
A este grupo también se lo indagó en el país por el operativo ‘Aniversario’ en el 2009. En este se decomisaron 8,3 toneladas de estupefacientes que pertenecían a esta red.
En el desarrollo de las indagaciones, un capitán del Ejército hoy en servicio pasivo fue apresado. Los investigadores que lo siguieron durante ocho meses afirmaron, además, que este supuestamente manejaba contactos con el cartel de Sinaloa.
El militar retirado recuperó su libertad, pero fue apresado nuevamente en junio pasado. La Policía determinó que este operaba con su organización desde una hacienda ubicada en Los Ríos.
En sus investigaciones, agentes concluyeron que la red del exuniformado actuaba supuestamente en las provincias donde se localizaron cinco avionetas sospechosas de tener nexos con el narcotráfico: Manabí, Santa Elena, Guayas y Los Ríos. En esta última posiblemente montó su base.
Los Choneros
Redes de trata y narcotráfico
De los 18 internos que se fugaron de la cárcel número dos de Guayaquil (La Roca), en febrero pasado, 17 ya fueron apresados.
Quien falta aún por detener es el líder de la banda los Choneros, Jorge Z. Agentes señalan que este reemplazó como jefe de la organización a Jorge V., quien fue acribillado en el 2007. En las indagaciones se estableció que la banda buscaba apropiarse de las rutas para los envíos de droga al exterior. La vulnerabilidad de las playas, en Manabí, fue aprovechada para las operaciones ilícitas.
La banda delictiva halló en Manabí su centro de operaciones, pero en informes de Inteligencia se indica que también tejió redes en Los Ríos, Santo Domingo, Esmeraldas, Santa Elena y Guayas.
Ellos aparecieron en el 2003 y su nombre lo adoptaron debido a que la mayor parte de sus integrantes son de Chone-Manabí. Entre el 2010 y el 2011, cinco de sus integrantes fallecieron en enfrentamientos con policías en Manta y El Carmen.
En septiembre del 2011, un presunto integrante fue detenido en Quito. En un comunicado, el Ministerio del Interior vinculó a esta organización con el crimen organizado, sicariato, asalto a entidades bancarias, tenencia ilegal de armas de fuego, asaltos en carreteras e intimidación a empresarios.
También informó que esta manejaba “una gran red de trata de personas que les inducían a la prostitución hacia Perú”.
El año pasado, el Tribunal Sexto de Garantías Penales de Manabí sentenció a 25 años de reclusión a los nueve implicados en el asesinato de Jairón Carreño Mendoza, en mayo del 2011, en Manabí. Los procesados supuestamente forman parte de los Choneros, según la Policía Nacional.
Otros cabecillas de la banda escaparon de La Roca junto a Jorge Z. y también estarían involucrados en la fuga. Según el ministro del Interior José Serrano, los miembros de la red que estuvieron apresados en La Roca hicieron un pacto con otro interno para escapar de este centro penitenciario. Los líderes de quienes organizaron la fuga fueron apresados en el operativo Halcón.
Los Urabeños La disputa de los Restrojos
La organización delictiva Urabeños mantiene en Colombia una fuerte disputa por territorio y control del narcotráfico con otro grupo delictivo: Los Rastrojos.
La primera constancia de la presencia en Ecuador de esta red delictiva se confirmó a principios de octubre con el hallazgo en Guayaquil de 900 kilos de cocaína. Estaban ocultos en el subsuelo de una casa en el norte de la ciudad.
Ese decomiso del 3 de octubre se sumó a otro más grande, un día antes, de 2,5 toneladas de estupefacientes, en una vivienda de un barrio del cantón La Libertad, en la provincia de Santa Elena.
El viceministro del Interior Javier Córdoba dijo que, después de estos decomisos, la Policía Nacional determinó la presencia de los Urabeños tras la detención de un foráneo en Guayaquil.
La intervención policial se tradujo en la aprehensión de 15 personas, entre ellas nueve extranjeros. “La información que se tiene es que esta banda estaría relacionada directamente con los Urabeños y los Rastrojos. Lo decimos por evidencia de que uno (de los foráneos) tiene conexión con las dos bandas”, afirmó.
¿Qué tipo de nexos?
El director nacional Antinarcóticos de la Policía, general Juan Carlos Barragán respondió que la forma cómo estaba almacenada la droga y cómo los detenidos supuestamente la sacaban por el Puerto Marítimo de Guayaquil “dejan muchísimas coincidencias que en el proceso se dejarán ver”.
El fiscal del Guayas Leonidas Lema, de la Unidad Especializada contra la Delincuencia Transnacional, señala que las organizaciones criminales están interconectadas en diferentes formas y grados, tanto en los envíos como en actividades de lavado del dinero proveniente de sus actividades. Lema tiene a su cargo procesos por narcotráfico relacionados con envíos al exterior.
Las autoridades investigan si en el país hay la presencia de un líder de los Urabeños. También se indaga si el semisumergible hallado en Limones (Esmeraldas), la semana pasada, pertenece a la organización. Tres sospechososo han sido apresados por este caso.
http://www.elcomercio.com/seguridad/narcotrafico-Ecuador-drogas-cartel-Colombia-Choneros-Urabenos-Rastrojos_0_1018698139.html
Fuente: EL COMERCIO
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