La familia de Kennia Ivonne Giler Mecías (19) mantenía la sospecha que el ex jefe policial de El Carmen, Digar Humberto Íñiguez Tufiño, la asesinó para luego abandonar su cadáver en la vía que comunica a ese cantón con La Concordia.
El policía fue detenido y en las declaraciones que habría dado en la audiencia de formulación de cargos supuestamente reconoció haber cometido el crimen, dijo la familia de la joven.
Según los allegados de Kennia Ivonne, al anochecer del miércoles 23 de noviembre ella se encontró con el mayor de policía Humberto Íñiguez Tufiño en el redondel de la vía que comunica a El Carmen con Pedernales y Chone.
Esa noche la chica desapareció y dos días después los familiares supieron que había sido asesinada; su cadáver estaba en la morgue de La Concordia.
La misma noche del 23 de noviembre la carmense fue asesinada con dos impactos de bala en la cabeza. Su victimario dejó abandonado el cadáver en un camino secundario que se enlaza con la vía Paralelo Cero y que comunica a El Carmen con La Concordia, donde fue localizada al amanecer del día siguiente.
SOSPECHAS. La familia de la chica dijo que si bien Humberto Íñiguez visitó momentáneamente la casa donde era velada Kennia, ellos no dejaron de sospechar que él tenía que ver con el crimen, y aun cuando recibieron varias amenazas para impedir que se denuncie el caso, brindaron toda la información que requirió la Fiscalía de La Concordia, la misma que actuó de oficio.
En declaraciones a El Diario, Luis Giler, padre de la víctima, manifestó que mientras Humberto Íñiguez prestaba sus servicios en El Carmen, inició una relación amorosa con Kennia, a quien le habría ofrecido matrimonio. Pero cuando la chica supo que el uniformado era casado empezaron los problemas entre ellos, que seguramente serían la causa del crimen, estima Luis Giler.
Como el policía acusado del asesinato estaba prestando sus servicios en el cantón Pichincha, el juzgado Cuarto de Garantías Penales de Quinindé (Esmeraldas) ofició al comando del cantón Bolívar para que proceda a su detención.
Contó que Íñiguez Tufiño fue apresado y llevado a la audiencia de formulación de cargos a la provincia de Esmeraldas, donde habría reconocido haber matado con dos impactos de bala en la cabeza a la mujer a la que le había prometido amor.
Según el padre de familia, el gendarme habría dicho que la asesinó porque ella le confesó esa noche que estaba embarazada de otro hombre. Pero esa versión es la que rechaza Giler, pues el resultado de la autopsia determinó que su hija no estaba embarazada.
Fuente: EL DIARIO*
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