Los visitantes empezaron a llegar a Manta desde la madrugada de hoy. Procedentes de Quito, Cuenca, Riobamba y Loja, entre otras ciudades, los turistas lo primero que hicieron fue dirigirse a la playa después de registrarse en los respectivos hoteles.
Luis Flores arribó desde Loja con su esposa y dos hijas. Nos juntamos con 24 personas y alquilamos un autobús para salir de gira hasta el sábado comenta Luis. Este lojano no sabía nada sobre la alerta naranja decretada por las autoridades gubernamentales debido a la presencia de fuertes corrientes y olas de entre dos y cuatro metros que tocarán las costas del país en la tarde y noche de hoy.
Los pescadores artesanales de Manta, Jaramijó, Crucita, Jama, Bahía, Pedernales, Puerto López y Puerto Cayo no sabían nada del oleaje.
En Manta, Jaime Estrada, alcalde de ese cantón y presidente del Comité de Operaciones Emergentes (COE), dijo que ante la eventualidad natural los organismos de socorro entre Cruz Roja, Policía, Armada Nacional y Cuerpo de Bomberos agruparon a 350 personas para las tareas de vigilancia de tres playas urbanas y ocho rurales.
José Vera, capitán del Puerto de Manta, informó que están prohibidas todas las actividades al filo del mar. Un campeonato nacional de skitebording (deslizamiento en las olas con tabla de surf y un parapente atado a la cintura) que empezaba este viernes fue suspendido.
Los comerciantes de pescado que concentran su actividad en la zona de Playita Mía en la parroquia Tarqui comentan que si llegara el aguaje habrá que esperarlo. "Esto no asusta a quienes vivimos frente al mar", señaló José Muentes, un comerciante de pescado.
Fuente: EL COMERCIO
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