miércoles, 21 de noviembre de 2012

Montecristi es centro de devoción de fieles que caminan hasta 24 horas

***SNN

 
 
 
 
MONTECRISTI, Manabí. Marcelo Mora (i) y Víctor Quijije caminaron 24 horas de Puerto López hasta llegar ayer al santuario.MONTECRISTI, Manabí. Marcelo Mora (i) y Víctor Quijije caminaron 24 horas de Puerto López hasta llegar ayer al santuario.

Ya caminaban con el último aliento por la vía Jipijapa-Montecristi. Habían transcurrido exactamente 24 horas desde que partieron de su natal Puerto López, en el sur de Manabí, con la mira puesta en la Basílica Menor de Montecristi.



Víctor Quijije, Leonardo Tomalá y Marcelo Mora habían salido a las 07:00 del pasado lunes y ayer, a esa misma hora, llegaron, exhaustos, hasta la iglesia, en cuyo interior se venera a la Virgen de Monserrate.


Quijije dijo que solo descansaron un par de horas en la comunidad Río Bravo, la madrugada de ayer. “Soy chofer y ya llevo dos años haciendo esta manda (penitencia) para que nos tenga con salud a mí y a mi familia y que no nos haga falta nada”, señaló, mientras se ponía los zapatos que los traía colgados del hombro, pues prefirió caminar con sandalias.


Los tres de Puerto López se emocionaron al ver la cruz que resalta sobre los 66 metros de altura de la basílica. La meta estaba cerca. Y no eran los únicos alegres, en la vía Portoviejo-Montecristi, cientos madrugaron ayer para cumplir el promedio de siete horas del periplo de 24 kilómetros entre la capital manabita y la cuna de Eloy Alfaro, donde hoy se celebran los actos centrales en homenaje a la Virgen de Monserrate, entre ellos, la procesión programada para las 14:00.


Dentro de ese grupo estaban Juan Carlos Loor y David González, quienes junto con otras diez personas salieron desde Portoviejo a las 23:30 del lunes. Loor contó que realiza la caminata por segundo año consecutivo como una muestra de agradecimiento hacia la Virgen.


Más atrás de este jovial grupo realizaban la manda los esposos Hipólito Villigua y Verónica Cedeño. Oriundos del cantón Santa Ana, ellos residen por trabajo en La Concordia (Santo Domingo de los Tsáchilas). No dejan la costumbre que heredaron de sus padres. “Primero pedimos por la salud de nuestra familia y luego que no nos falte trabajo. Sé que la Virgencita de Monserrate nos da esa bendición”, relató Villigua.


En la ruta de Manta a Montecristi, por donde en los días previos caminó la mayor cantidad de feligreses, ayer lo hacían Patricia Anchundia junto con su hermana Ana y sus sobrinos.



Ella reside en el barrio La Revancha de Manta, de donde había salido a las 05:00 con su hija, quien padece de parálisis cerebral. Patricia relató que la peregrinación era una forma de agradecerle a la Virgen por la mejora que experimenta su hija, quien nació con el problema de salud y ahora debe movilizarse en silla de ruedas.


Ya en el altar, la meta final de los feligreses, se apreciaba a decenas de personas con rostros desencajados, caminar lento y hasta con principios de desmayo, pero llenas de fe. Quienes llegaron temprano debieron hacer columna y esperar a que se abrieran las puertas de la basílica, pasadas las 05:00.


Los primeros de la cola eran unos devotos de Los Arenales, de la parroquia Crucita (Portoviejo). Habían salido a las 19:00 del lunes y llegado a Montecristi pasadas las 03:00, luego de un recorrido de 75 kilómetros.


Recién a las 05:15 se abrieron las puertas del altar y ahí los fieles pudieron tocar el manto de la Virgen, último ritual que comprende esta caminata, que se origina desde cualquier rincón de Manabí o de otras zonas del país y que cada noviembre se moviliza por diversas carreteras hasta este santuario.


Hoy, en el día central de las celebraciones patronales montecristenses, llegarán los últimos caminantes y participarán en la procesión principal con la imagen, a las 14:00. Antes se hará una misa campal. Como parte de la fiesta también habrá eventos sociales.



Detalles Panorama religioso y comercial
Niños en brazosNiños en brazos
Entre los fieles hay cientos de personas con niños en brazos, como Fabián Intriago (foto), quien ayer llegó a Montecristi a las 03:00, desde Los Arenales (Crucita). Con una niña de 2 meses caminó 75 km.
 
 
Un minuto ante la imagen
Un minuto ante la imagen
Al llegar al altar y pese a las horas de caminata, los fieles tienen apenas un minuto para tocar el manto de la imagen, pedir una bendición, dar una donación económica (la más común es de $ 1) y recibir una estampita.
 
 
500 puestos informales

500 puestos informales
Comerciantes de diferentes regiones del país llegaron a Montecristi por la romería. Coparon las principales vías y venden objetos religiosos, alimentos preparados, ropa, zapatos e incluso objetos navideños y juguetes.


 
 
Fuente: EL UNIVERSO*
 
 
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario