El tráfico vehicular se cerró dos horas. El choque entre dos buses urbanos provocó que la avenida
Marilyn Alferes, de 18 años, caminaba a las 06:40 rumbo al Colegio Artesanal Caranqui cuando un bus que supuestamente descendía sin frenos, por la avenida Atahualpa, la arrolló.
Ella y Martín Calderón, de 45, años murieron en el sector de Caranqui, en el sur de Ibarra.
Minutos después (06:45, hora del accidente), el bus -de placas PAO-030- se impactó violentamente contra otro bus -de placas PZZ-323- que subía por la calle empinada, la cual conduce hacia al volcán Imbabura.
“Marilyn subía, como todos los días a clases. Estaba en el último año de bachillerato”, recuerda su tía Mercedes Matango.
Por causa del choque, dos casas aledañas a la vía resultaron parcialmente afectadas. “Yo le hacía dormir a mi hijo (de un año) sobre la cama. De repente se escuchó un frenazo y los adobes de la pared y las tejas del techo se cayeron encima de nosotros”.
Así narra, exaltada Zoila Alarcón, quien vive en una de las casas que recibió el impacto de los buses. Las unidades pertenecen a la Cooperativa San Miguel de Ibarra.
El choque fue tan fuerte que el vehículo que subía se dio la vuelta y descendió sin control unos 100 metros hasta impactarse contra un poste. En el golpe murió Calderón, el controlador del bus que bajaba.
Lo único que se sabe es que Calderón era oriundo de Guayaquil y vivía solo en Ibarra.
Zoila Chasiguano, testigo de la tragedia, caminaba a comprar pan cuando escuchó el estruendo. Horrorizada vio el percance. “Los pasajeros de los dos vehículos -la mayoría niños que iban a la escuela- gritaban desesperados”.
Los bomberos y la Policía trasladaron a los heridos a diferentes casas de salud. Según Yu Ling Reascos, directora de Salud de Imbabura, el accidente dejó inicialmente dos fallecidos y 23 heridos. Los últimos fueron trasladados a los hospitales San Vicente de Paúl (12 ), IESS Ibarra (10) y a la Clínica Metropolitana (1).
Los familiares de las víctimas solicitaban información en los sanatorios. En el San Vicente el acceso estuvo congestionado, por lo que tuvo que actuar la Policía.
Las sirenas de las ambulancias se mezclaban con los gritos de los heridos y los llamados a los médicos por los altoparlantes.
A las 13:00, la Dirección de Salud informó del fallecimiento de Marco Benítez, de 27 años. Él era el conductor de automotor que subía y fue impactado por el otro vehículo. Su tórax quedó prácticamente destrozado internamente, lo que le habría provocado un paro cardiorrespiratorio.
Mientras el conductor del bus, que bajaba supuestamente sin frenos, Marco Tirira, de 45 años, fue trasladado a Quito en un helicóptero Súper Puma del Ejército. El chofer tenía un trauma grave en la parte frontal de la cabeza.
Los médicos del Hospital San Vicente de Paúl también ordenaron el traslado de Ibarra a Quito de María Carlosama, de 27 años. Ella tenía el rostro desfigurado y necesitaba la asistencia de un cirujano maxilofacial. Carlosama fue trasladada en una ambulancia, pues el rescate aéreo se complicó, porque el aeropuerto de Ibarra dejó de operar.
La terminal aérea cerró sus puertas el 16 de septiembre del año anterior, por decisión del alcalde de Ibarra, Jorge Martínez, quien consideró que no era rentable para el cantón.
El Burgomaestre tiene previsto construir un parque en el lugar.
Ayer, la falta de personal de la torre de control y una vía que abrió el Municipio por la mitad de la pista complicaron el rescate aéreo. Tirira tuvo que esperar 30 minutos en la ambulancia, que estaba parqueada en el ex aeropuerto, hasta que llegara la aeronave.
La mayoría de heridos, que tenían golpes, fue dada de alta hasta el mediodía. Y los buses fueron trasladados a la Policía.
Según Marcelo Simbaña, gerente de la Cooperativa San Miguel, los 123 buses de la empresa tienen el Seguro Obligatorio de Accidente de Tránsito. Hoy serán velados Marilyn Alferes, Martín Calderón y Marco Benítez.
‘80 percances ocurren al mes’
En lo que va de este año han ocurrido 856 accidentes de tránsito en Imbabura. Según Patricio Carrasco, jefe provincial de Control de Tránsito, la mayoría de percances ocurre por el exceso de velocidad y la impericia.
Las estadísticas de la Jefatura de Control de Tránsito y Seguridad Vial de Imbabura indican que los choques entre autos son el accidente más común. Del 1 de enero y al 14 de noviembre se reportaron 376 choques, 101 atropellamiento y 99 estrellamientos.
Las noticias sobre choques, volcamientos, atropellamientos son diarias en la provincia. “La gente abusa del buen estado de las carreteras y acelera sin medir las consecuencias”, comenta Carrasco. También dice que en Imbabura ocurren 80 accidentes en promedio al mes.
En este año, solo hasta agosto, se reportaron 63 muertos y 364 heridos. (La Policía no proporcionó datos totales del año).
El accidente más trágico del 2012 ocurrió el 19 de febrero, cuando un bus de la Cooperativa Espejo, que cubría la ruta Ibarra-San Lorenzo (Esmeraldas), se impactó contra un muro y cayó a un barranco. En esta tragedia perecieron 30 personas.
Fuente: EL COMERCIO*
Ella y Martín Calderón, de 45, años murieron en el sector de Caranqui, en el sur de Ibarra.
Minutos después (06:45, hora del accidente), el bus -de placas PAO-030- se impactó violentamente contra otro bus -de placas PZZ-323- que subía por la calle empinada, la cual conduce hacia al volcán Imbabura.
“Marilyn subía, como todos los días a clases. Estaba en el último año de bachillerato”, recuerda su tía Mercedes Matango.
Por causa del choque, dos casas aledañas a la vía resultaron parcialmente afectadas. “Yo le hacía dormir a mi hijo (de un año) sobre la cama. De repente se escuchó un frenazo y los adobes de la pared y las tejas del techo se cayeron encima de nosotros”.
Así narra, exaltada Zoila Alarcón, quien vive en una de las casas que recibió el impacto de los buses. Las unidades pertenecen a la Cooperativa San Miguel de Ibarra.
El choque fue tan fuerte que el vehículo que subía se dio la vuelta y descendió sin control unos 100 metros hasta impactarse contra un poste. En el golpe murió Calderón, el controlador del bus que bajaba.
Lo único que se sabe es que Calderón era oriundo de Guayaquil y vivía solo en Ibarra.
Zoila Chasiguano, testigo de la tragedia, caminaba a comprar pan cuando escuchó el estruendo. Horrorizada vio el percance. “Los pasajeros de los dos vehículos -la mayoría niños que iban a la escuela- gritaban desesperados”.
Los bomberos y la Policía trasladaron a los heridos a diferentes casas de salud. Según Yu Ling Reascos, directora de Salud de Imbabura, el accidente dejó inicialmente dos fallecidos y 23 heridos. Los últimos fueron trasladados a los hospitales San Vicente de Paúl (12 ), IESS Ibarra (10) y a la Clínica Metropolitana (1).
Los familiares de las víctimas solicitaban información en los sanatorios. En el San Vicente el acceso estuvo congestionado, por lo que tuvo que actuar la Policía.
Las sirenas de las ambulancias se mezclaban con los gritos de los heridos y los llamados a los médicos por los altoparlantes.
A las 13:00, la Dirección de Salud informó del fallecimiento de Marco Benítez, de 27 años. Él era el conductor de automotor que subía y fue impactado por el otro vehículo. Su tórax quedó prácticamente destrozado internamente, lo que le habría provocado un paro cardiorrespiratorio.
Mientras el conductor del bus, que bajaba supuestamente sin frenos, Marco Tirira, de 45 años, fue trasladado a Quito en un helicóptero Súper Puma del Ejército. El chofer tenía un trauma grave en la parte frontal de la cabeza.
Los médicos del Hospital San Vicente de Paúl también ordenaron el traslado de Ibarra a Quito de María Carlosama, de 27 años. Ella tenía el rostro desfigurado y necesitaba la asistencia de un cirujano maxilofacial. Carlosama fue trasladada en una ambulancia, pues el rescate aéreo se complicó, porque el aeropuerto de Ibarra dejó de operar.
La terminal aérea cerró sus puertas el 16 de septiembre del año anterior, por decisión del alcalde de Ibarra, Jorge Martínez, quien consideró que no era rentable para el cantón.
El Burgomaestre tiene previsto construir un parque en el lugar.
Ayer, la falta de personal de la torre de control y una vía que abrió el Municipio por la mitad de la pista complicaron el rescate aéreo. Tirira tuvo que esperar 30 minutos en la ambulancia, que estaba parqueada en el ex aeropuerto, hasta que llegara la aeronave.
La mayoría de heridos, que tenían golpes, fue dada de alta hasta el mediodía. Y los buses fueron trasladados a la Policía.
Según Marcelo Simbaña, gerente de la Cooperativa San Miguel, los 123 buses de la empresa tienen el Seguro Obligatorio de Accidente de Tránsito. Hoy serán velados Marilyn Alferes, Martín Calderón y Marco Benítez.
‘80 percances ocurren al mes’
En lo que va de este año han ocurrido 856 accidentes de tránsito en Imbabura. Según Patricio Carrasco, jefe provincial de Control de Tránsito, la mayoría de percances ocurre por el exceso de velocidad y la impericia.
Las estadísticas de la Jefatura de Control de Tránsito y Seguridad Vial de Imbabura indican que los choques entre autos son el accidente más común. Del 1 de enero y al 14 de noviembre se reportaron 376 choques, 101 atropellamiento y 99 estrellamientos.
Las noticias sobre choques, volcamientos, atropellamientos son diarias en la provincia. “La gente abusa del buen estado de las carreteras y acelera sin medir las consecuencias”, comenta Carrasco. También dice que en Imbabura ocurren 80 accidentes en promedio al mes.
En este año, solo hasta agosto, se reportaron 63 muertos y 364 heridos. (La Policía no proporcionó datos totales del año).
El accidente más trágico del 2012 ocurrió el 19 de febrero, cuando un bus de la Cooperativa Espejo, que cubría la ruta Ibarra-San Lorenzo (Esmeraldas), se impactó contra un muro y cayó a un barranco. En esta tragedia perecieron 30 personas.
Fuente: EL COMERCIO*
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