Por eso el complot internacional con la ayuda de los traidores de la patria, que a toda costa buscan impedir la reelección de nuestro Presidente.Por: Nancy Bravo de Ramsey
Las cartas ya están echadas y puestas sobre la mesa electoral. Y mientras Rafael Correa, nuestro presidente y candidato a la reelección avanza impulsado por los mejores pronósticos de la decisión del pueblo, los aspirantes de la oposición tejen por su lado marañas de calumnias, trampas y emboscadas encaminadas todas a lesionar la imagen del Primer Mandatario, no importa los recursos a los que ellos recurran.
Cada uno de los postulantes antagónicos al régimen sabe que va a perder en la lid electoral del próximo febrero. Pero sin embargo ellos no renuncian a la esperanza de debilitar las posibilidades del más calificado.
Todos juntos en un gran complot, los diversos grupos y partidos políticos de la oposición, de inmediato darán comienzo a los ardides más tenebrosos, ayudados por los quejumbrosos banqueros que hipócritamente lanzan sus dolorosos ayes a sabiendas de que no están perdiendo nada al entregar solo una parte de sus elevadas ganancias para completar el alza del Bono de Desarrollo Humano.
Esto es, que sus ganancias únicamente se verán un tanto reducidas. Además, los candidatos de la oposición estarán asistidos por los medios de comunicación adversos al Gobierno y su mala costumbre de falsear y manipular la verdad en el afán de desorientar la conciencia ciudadana. No les interesa que más adelante se los desenmascare mediante las respectivas causas judiciales, pues hasta entonces ya habrá pasado el proceso electoral.
Y ni qué decir de la colaboración muy posiblemente ya negociada con la CIA y su elevado presupuesto para atender los requerimientos de los enemigos del régimen ecuatoriano, en su afán por atentar contra el proceso electoral planificado dentro de los cánones de honestidad y efectividad.
Juntas las fuerzas más oscuras del país, aquellas que se sienten lesionadas en sus escandalosos privilegios y abusos que históricamente se han venido ejecutando, aún por el camino de la traición a los intereses y la soberanía de la nación y a los derechos de las mayorías de la población ecuatoriana, para destruir el más valioso proceso de transformación socio-político-económico que ha vivido el país en los últimos tiempos y disminuir con ello la imagen del personaje que ha logrado encauzar a la República por el camino justo, a fin de completar el necesario cambio radical ya comenzado por él.
A esas fuerzas oscuras nacionales, banca inmoral, prensa corrupta, partidos políticos de ultraderecha disfrazados de izquierdistas, grupos inescrupulosos sin conciencia, que desean el poder para continuar en su afán tradicional de medrar y asaltar las riquezas del Estado, sectores del narcotráfico y del contrabando, el lastre moral de la nación que con este Gobierno se encuentran debilitados y en camino a desaparecer, empezarán en breve el más duro acoso alrededor de Rafael Correa y los elementos más cercanos a él.
Para ellos, esto es un asunto de vital importancia, que requiere, por tanto, la intervención de la CIA, cuya tarea fundamental parece ser el fortalecimiento de la hegemonía de Estados Unidos en el plano mundial, lo que significa la destrucción de los líderes de los procesos revolucionarios del planeta y el término de tales procesos transformadores, como lo son Rafael Correa y la Revolución Ciudadana.
Por eso el complot internacional con la ayuda de los traidores de la patria, que a toda costa buscan impedir la reelección de nuestro Presidente.
Fuente: EL TELÈGRAFO*
Cada uno de los postulantes antagónicos al régimen sabe que va a perder en la lid electoral del próximo febrero. Pero sin embargo ellos no renuncian a la esperanza de debilitar las posibilidades del más calificado.
Todos juntos en un gran complot, los diversos grupos y partidos políticos de la oposición, de inmediato darán comienzo a los ardides más tenebrosos, ayudados por los quejumbrosos banqueros que hipócritamente lanzan sus dolorosos ayes a sabiendas de que no están perdiendo nada al entregar solo una parte de sus elevadas ganancias para completar el alza del Bono de Desarrollo Humano.
Esto es, que sus ganancias únicamente se verán un tanto reducidas. Además, los candidatos de la oposición estarán asistidos por los medios de comunicación adversos al Gobierno y su mala costumbre de falsear y manipular la verdad en el afán de desorientar la conciencia ciudadana. No les interesa que más adelante se los desenmascare mediante las respectivas causas judiciales, pues hasta entonces ya habrá pasado el proceso electoral.
Y ni qué decir de la colaboración muy posiblemente ya negociada con la CIA y su elevado presupuesto para atender los requerimientos de los enemigos del régimen ecuatoriano, en su afán por atentar contra el proceso electoral planificado dentro de los cánones de honestidad y efectividad.
Juntas las fuerzas más oscuras del país, aquellas que se sienten lesionadas en sus escandalosos privilegios y abusos que históricamente se han venido ejecutando, aún por el camino de la traición a los intereses y la soberanía de la nación y a los derechos de las mayorías de la población ecuatoriana, para destruir el más valioso proceso de transformación socio-político-económico que ha vivido el país en los últimos tiempos y disminuir con ello la imagen del personaje que ha logrado encauzar a la República por el camino justo, a fin de completar el necesario cambio radical ya comenzado por él.
A esas fuerzas oscuras nacionales, banca inmoral, prensa corrupta, partidos políticos de ultraderecha disfrazados de izquierdistas, grupos inescrupulosos sin conciencia, que desean el poder para continuar en su afán tradicional de medrar y asaltar las riquezas del Estado, sectores del narcotráfico y del contrabando, el lastre moral de la nación que con este Gobierno se encuentran debilitados y en camino a desaparecer, empezarán en breve el más duro acoso alrededor de Rafael Correa y los elementos más cercanos a él.
Para ellos, esto es un asunto de vital importancia, que requiere, por tanto, la intervención de la CIA, cuya tarea fundamental parece ser el fortalecimiento de la hegemonía de Estados Unidos en el plano mundial, lo que significa la destrucción de los líderes de los procesos revolucionarios del planeta y el término de tales procesos transformadores, como lo son Rafael Correa y la Revolución Ciudadana.
Por eso el complot internacional con la ayuda de los traidores de la patria, que a toda costa buscan impedir la reelección de nuestro Presidente.
Fuente: EL TELÈGRAFO*
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