domingo, 18 de noviembre de 2012

Ecuatorianos llenan Palacio de Convenciones en Madrid para escuchar a Correa

***SNN



 







Desde muy temprano, los ecuatorianos llegaron portando banderas, carteles, pitos y más artículos para recibir al Jefe de Estado.



Madrid (España).- Más de dos mil ecuatorianos abarrotaron las instalaciones del Palacio de Convenciones de Madrid donde el Presidente Rafael Correa ofrecerá su rendición de cuentas a los compatriotas residentes en la capital de España.

 
Incluso un grupo de 15 hinchas de Emelec, pertenecientes a la Boca del Pozo - Madrid, se hizo presente con bombos, tambores, camisetas y bufandas. "Correa tu no eres pelucón..." "Sólo le pido a Dios que la Boca del Pozo esté presente...", cantaban sin parar los hinchas eléctricos en la parte de atrás del centro de convenciones donde desplegaron una tela grande como sí estuvieran en el estadio George Capwell.
 
 
Ya en el interior del Centro de Convenciones, Cecilia Astaiza, una ciudada ecuatoriana se mostraba feliz por haber encontrado un buen sitio para observar y escuchar la rendición de cuentas del Mandatario. "Según lo que veo, escucho y lo que me ha contado mi padre, Ecuador está muy bien, allá no se habla de crisis económica", señala.
 
 
Ella se siente contenta por recibir la visita de su Presidente y asegura que en diez años que vive en España "no recuerdo otro Presidente que haya venido, sin embargo es la tercera va que viene (Rafael) Correa y es bueno que nos haya convocado a todos".
 
 
Leonardo Pachuca, oriundo de Catamayo-Loja, dice haber seguido la gira del Jefe de Estado a través de la televisión y el internet, así pudo enterarse de muchas cosas que suceden en el país, pero no conforme con ello, llegó al Palacio de Convenciones para directamente escucharlo y verlo.
 
 
"Mis hermanos me dicen que Ecuador está bien, para lo que eran antes ahora ha cambiado bastante", manifiesta Leonardo.
 
 
Inmediatamente suena la música ecuatoriana y todos se levantan de sus asientos para bailar y cantar lejos de su Patria, aquellas melodías que un día cantaron y bailaron en sus ciudades y pueblos, junto a los suyos.
 
 
 
Fuente: EL CIUDADANO*
 
 

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