La cifra iría entre 2 mil y 5 mil dólares por la mala utilización de bienes públicos durante la revuelta del 30 de septiembre del 2010.
Los policías sancionados rechazan la medida, que les fue informada en la Comandancia General en Quito.
La sanción se impuso de acuerdo a un informe de Contraloría que establece los daños registrados en el Hospital, Cuartel Policial y en el área de Rastrillo o Bodega de Armas.
Uno de los policías sancionados, quien no quiso mostrar su rostro en Ecuavisa, aclaró que "no voy a pagar porque no tengo de donde".
El Coronel Julio Cueva, jefe policial, reclamó porque lo han puesto como Comandante de la Unidad de Vigilancia Centro-Occidente cuando él no desempeñaba ese cargo.
Según el reporte de Ecuavisa, no les informaron sobre los daños registrados ni se les comprobó la presunta mal utilización de bienes públicos.
Los policías tienen 30 días para presentar alguna prueba de descargo.
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