miércoles, 21 de septiembre de 2011

Portoviejo no tiene vuelos desde el aeropuerto Reales Tamarindos

***SNN




Desde el 21 de agosto último, en el aeropuerto Reales Tamarindos de Portoviejo solo aterrizan aviones bimotores con capacidad para seis pasajeros.


En esas aeronaves llegan ejecutivos procedentes de Guayaquil, comenta Armando Alcívar, jefe del aeropuerto portovejense.


Antes de ese día operaba la compañía aérea VIP bajo la figura legal de ‘código compartido’ con Aerogal. Cubría la ruta Quito-Portoviejo y viceversa.


Lo hacía con un avión Dornier, de fabricación alemana, cuya capacidad es para 32 pasajeros. “De un día para el otro, en agosto recibimos una carta de Aerogal y VIP, donde nos exponían que suspendían las operaciones en la ruta Quito-Portoviejo y viceversa, debido a que el avión ingresaba a mantenimiento con carácter indefinido”, dice Alcívar.


La noticia sorprendió a los viajeros de la capital manabita, ubicada en el centro de la provincia.


La economía de esta ciudad se sustenta en el comercio y el movimiento de burócratas. Está a 36 kilómetros de Manta, donde se encuentra el aeropuerto internacional Eloy Alfaro.


“Nos llamó la atención la decisión de Aerogal, sabemos que la ruta era rentable, pues más del 75% de los asientos de los vuelos de ida y de vuelta siempre estaba cubierto”, señala Alba González, presidenta de la Cámara de Comercio de Portoviejo.


En los 81 años de vida del aeropuerto Reales Tamarindos “nunca hubo accidentes, es un aeropuerto doméstico estratégico para Manabí”, dice Jorge Luis Guillen, ex presidente de la Cámara de Comercio de Portoviejo. A este aeropuerto se lo quiere minimizar desde octubre del 2009, dice.


Aún no se comprende -comenta- cómo es que se planifica el desarrollo de Manabí. “El aeropuerto para nosotros y en cualquier parte del mundo es la puerta que impulsa a las zonas deprimidas, en Portoviejo se lo necesita”.


Guillen no encuentra una respuesta razonable, pues en el 2009 el aeropuerto se paralizó por siete meses, debido a los trabajos de recapeo de la pista, por USD 1 700 000. Fue el ex ministro de Transporte y Obras Públicas, Javier Casal, quien ordenó los trabajos. “Después en octubre del mismo año, Casal dijo que el aeropuerto Reales Tamarindos sería cerrado...”, indica el empresario.


La paralización por las tareas de mejoramiento de la pista alejó a la empresa Tame, que voló hasta inicios del 2009, sin embargo Guillen asegura que las gestiones no se estancaron para mantener operativo el aeropuerto.


Después se conversó con los ejecutivos de Ícaro, Aerogal y Lan. Entonces Aerogal dio una respuesta positiva para funcionar en la ruta de Quito a Portoviejo.


“No permitiremos que cierren de un plumazo al aeropuerto; las voces de apoyo para mantener esta terminal aérea se siguen sumando, es una ciudad de 280 000 habitantes que está dispuesta a defender al aeródromo”.


Las gestiones para conseguir otra aerolínea siguen. González indica que se reunieron con funcionarios de Tame en Quito. Están a la espera de adquirir aviones pequeños con capacidad para 75 pasajeros, una vez que concreten esas adquisiciones considerarían volver a Portoviejo.


El Cabildo de Portoviejo en pleno aprobó ayer publicar un manifiesto de la ciudad en apoyo al funcionamiento y continuidad del aeropuerto Reales Tamarindos.


Mientras tanto, los 27 trabajadores de la terminal siguen laborando. Están impecablemente vestidos con pantalones de lino, camisas blancas y corbatas rojas.


En el edificio, el piso de mármol está reluciente, el sistema de aire acondicionado está en perfectas condiciones y prenden el equipo de rayos X de vez en cuando para que se mantenga activo.


La zona de parqueo y espacios verdes lucen remozados tras una inversión del Municipio de USD 40 000. Al ingreso, tres taxistas esperan el arribo de algún vuelo de los aviones bimotores.


Jorge Cedeño tiene un taxi. “El arribo del avión de VIP por lo menos nos daba la oportunidad de hacer un flete hacia Bahía, Rocafuerte, Chone, Jipijapa y Bolívar; ahora nos vemos las caras con los compañeros”.



Punto de vista
Bruno Poggi/ Empresario

‘El aeropuerto es estratégico’


Si las autoridades de Gobierno insisten en cerrar el aeropuerto Reales Tamarindos, la única salida sería que el Municipio de Portoviejo y su grupo de ediles impulsen la decisión de pedir la competencia del aeródromo.


Todos sabemos lo que está sucediendo, alguna vez se corrió un rumor en Portoviejo de que el Gobierno pretendía construir un gran parque en las instalaciones del aeropuerto, eso no es procedente.


Parece que la memoria de la gente es muy frágil. Es que acaso ya se olvidaron que cuando hay fenómenos naturales colapsan carreteras; hasta en un hipotético caso que se presentase un tsunami, el Reales Tamarindos es estratégico. En los fenómenos de El Niño de 1982-1983 y 1997-1998 toda la logística para la provincia se transportaba por vía aérea desde este aeropuerto.


Fuente: EL COMERCIO*

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