QUITO, AFP
Un golpe de mano resulta ser el único recurso para que funcione el computador de un despacho judicial de Quito, imagen patética de la crisis de la justicia ecuatoriana, a la que el gobierno declaró en emergencia abriendo un nuevo frente de conflicto con la oposición.
"De que funciona, funciona, pero hay que estarle dando golpes", dice un funcionario mientras descarga la mano sobre el monitor de la única computadora asignada a esta oficina de embargos del Palacio de Justicia donde trabajan 10 personas.
Los demás ordenadores e impresoras son de los empleados, al igual que algunos ficheros, añade este abogado que pide mantener su nombre en reserva.
"Los escritorios estaban tirados en una bodega y recuperamos los mejores. Desde que entré hace 13 años nunca tuve donde sentarme ni guardar documentos", refiere el hombre al lado de unas sillas de cuero rotas.
Sin embargo, admite que en poblados pequeños la situación es peor. "Hay juzgados a punto de caerse", afirma.
Cerca de allí, en un corredor de paredes sucias y descascaradas, hay varios juzgados con pilas de carpetas -algunos con máquinas de escribir manuales-, entre ellos uno para atención a la niñez en aparente mejor estado.
Refundido como un empleado más se encuentra el responsable, Cristhian Recalde, quien realiza las audiencias en su escritorio, para lo cual debe pedir sillas prestadas.
"No es cuestión de egos, sino de tener un espacio adecuado", aclara este joven jurista, quien no dispone de teléfono ni internet y debe comprar los códigos y leyes de su bolsillo. Una abogada funge como archivadora en su oficina.
Ante esta situación que tilda de "desastre" y que, advierte, plantea un riesgo "inminente" de conmoción interna, el presidente Rafael Correa declaró el lunes en emergencia al sector judicial, que tiene pendientes 1,2 millones de causas, según cifras oficiales.
La medida regirá durante dos meses y busca agilizar la entrega de recursos para infraestructura, tecnología y contratación de personal. También para la depuración de los procesos acumulados, pues muchos habrían prescrito.
En Ecuador, país de 14,3 millones de habitantes, hay 1.149 jueces.
"Necesitamos en el corto plazo 400 millones de dólares para reestructurar la justicia y la única forma de asignar recursos (fuera del presupuesto) es ésta" , justificó Correa.
La emergencia se enmarca en un proceso de reforma aprobado en referendo el 7 de mayo, dentro del cual un Consejo de la Judicatura Transitorio (CJT) -de tres miembros y encabezado por un delegado del gobierno- debe reorganizar el sistema en 18 meses, contados desde el 26 de julio.
Según Correa, la reforma, en la cual serán evaluados unos 8.000 funcionarios, costará 600 millones de dólares hasta 2015 -que aún no están disponibles-, de los cuales 400 millones se ejecutarán hasta 2013.
El gobernante socialista propuso la reestructuración para "purgar" al sector de "jueces corruptos y negligentes" y con miras a combatir el creciente sentimiento de inseguridad.
De acuerdo con la Fiscalía, 4.387 presos salieron en libertad entre 2007 y 2010 al caducar su prisión preventiva. Hasta mayo pasado había 4.067 detenidos sin condena.
La emergencia fue rechazada por la oposición, que busca anular el decreto. Incluso, el congresista Enrique Herrería planteó destituir al presidente alegando que "no tenía atribución" para ello.
Fabián Corral, decano de derecho de la Universidad San Francisco, sostiene que las emergencias se reservan para hechos súbitos y el "largo proceso de deterioro de la justicia no lo es". Además, la figura "no es para actuar sobre otro poder".
Un diagnóstico de la Universidad de Talca (Chile) , que asesora la reforma, asegura que Ecuador tiene una administración de justicia caótica, caduca e ineficiente, en la que el juez concentra el poder y no rinde cuentas.
Los jueces "pasan el tiempo atendiendo gente. Si viene una coima o algo por amistad, te tramitan el juicio rápido", sostiene el abogado de embargos, que argumenta que "la justicia no solo necesita plata", sino reformas legales para un servicio de calidad".
No hay comentarios:
Publicar un comentario