Ganador de más de un millón de dólares del sorteo del Pozo Millonario. Por su seguridad, se decidió cubrir el rostro del afortunado.
La suerte cayó por partida triple en algunos hogares manabitas, especialmente en Chone, Portoviejo y algunas localidades del norte de Manabí, donde residen los ganadores de los tres sorteos de la Lotería Nacional en Navidad y fin de año.
En total, más de $ 5 millones se repartieron en esa zona: Los tres millones de dólares del juego El Regalo más grande de la Navidad; un millón de dólares con la Lotería de fin de año y más de un millón de dólares con el Pozo Millonario.
El centro de la suerte estuvo en Chone. Todos los números premiados pasaron por las manos de Geovanny Lara Barberán, quien es el agente distribuidor en este cantón manabita y fue el encargado de repartirlos desde su local.
“Por mis manos ha pasado la suerte de todos los ganadores del sorteo extraordinario de Navidad y de fin de año; la diosa fortuna se encargó de hacerlo realidad en cada uno de sus hogares”, enfatizó a los ejecutivos de Lotería Nacional el suertudo distribuidor.
El capítulo de la suerte tuvo su inicio cuando el Pozo Millonario cayó en tierra chonera con el sorteo del 11 de diciembre del 2011. El manabita José M, un jornalero agricultor, fue el feliz ganador de ese sorteo.
“Yo anhelaba poder comprar la hacienda de mi patrona, ahora puedo hacerlo realidad”, dijo el hombre cuando se acercó a cobrar el premio de $ 1’168.221 del Pozo Millonario.
Luego vino lo mejor. Un lotero tuvo a cargo la venta del número 03992, que lo adquirió un chonero en forma total, el entero, como se dice en el lenguaje lotero. Fue aquel ciudadano el que se ganó el sorteo 5396 y se llevó el denominado El regalo más grande de la Navidad 2011, de $ 3 millones. El canillita que vendió la suerte recibió como recompensa del ganador un guachito ($ 75.000).
Pero la suerte seguía golpeando puertas manabitas. También en Chone se vendió el número 85713 que entregó un millón de dólares al entero. Este cayó fraccionado en Chone, Portoviejo y otras localidades del norte manabita.
Entre las familias ganadoras están los Varela Muñoz, Bravo Zambrano, Posligua Bailón, Pinargote Mendoza, Ibarra Chávez, Cedeño Holguín, Cedeño Andrade y Alcívar Cedeño, quienes recibieron 33 mil dólares por su guachito o fracción.
Jorge Basurto Mendoza, de 52 años, fue el lotero que el pasado 31 de diciembre entregó los guachitos al venderlos de forma fraccionada por la terminal terrestre de Chone. “No soy adivino”, expresó hace once días al responder sobre su sentir tras haber repartido la fortuna que entregó Lotería Nacional al cierre del 2011.
“Suelo dejarme un guachito por semana, pero esta vez estuvo tan bueno el negocio que lo vendí todo”, dijo Basurto.
Hasta octubre pasado, el chonero trabajó como bodeguero y guardián para la coop. Reina del Camino, pero luego se retiró de este empleo.
“Desde entonces me dedico a vender Lotería para el sustento de mi familia: mi esposa y mis cuatro hijos”, expresó el hombre de la suerte.
Encargo de cobro
El ganador del sorteo de la lotería de Navidad, que obtuvo tres millones de dólares, encargó el cobro del premio, por seguridad, a un banco nacional. Compartió su premio con el canillita.
Temor de vendedores
Uno de los vendedores de lotería en Chone contó que había recibido amenazas porque creían que él comercializó uno de los números premiados y recibió un guachito de premio.
En total, más de $ 5 millones se repartieron en esa zona: Los tres millones de dólares del juego El Regalo más grande de la Navidad; un millón de dólares con la Lotería de fin de año y más de un millón de dólares con el Pozo Millonario.
El centro de la suerte estuvo en Chone. Todos los números premiados pasaron por las manos de Geovanny Lara Barberán, quien es el agente distribuidor en este cantón manabita y fue el encargado de repartirlos desde su local.
“Por mis manos ha pasado la suerte de todos los ganadores del sorteo extraordinario de Navidad y de fin de año; la diosa fortuna se encargó de hacerlo realidad en cada uno de sus hogares”, enfatizó a los ejecutivos de Lotería Nacional el suertudo distribuidor.
El capítulo de la suerte tuvo su inicio cuando el Pozo Millonario cayó en tierra chonera con el sorteo del 11 de diciembre del 2011. El manabita José M, un jornalero agricultor, fue el feliz ganador de ese sorteo.
“Yo anhelaba poder comprar la hacienda de mi patrona, ahora puedo hacerlo realidad”, dijo el hombre cuando se acercó a cobrar el premio de $ 1’168.221 del Pozo Millonario.
Luego vino lo mejor. Un lotero tuvo a cargo la venta del número 03992, que lo adquirió un chonero en forma total, el entero, como se dice en el lenguaje lotero. Fue aquel ciudadano el que se ganó el sorteo 5396 y se llevó el denominado El regalo más grande de la Navidad 2011, de $ 3 millones. El canillita que vendió la suerte recibió como recompensa del ganador un guachito ($ 75.000).
Pero la suerte seguía golpeando puertas manabitas. También en Chone se vendió el número 85713 que entregó un millón de dólares al entero. Este cayó fraccionado en Chone, Portoviejo y otras localidades del norte manabita.
Entre las familias ganadoras están los Varela Muñoz, Bravo Zambrano, Posligua Bailón, Pinargote Mendoza, Ibarra Chávez, Cedeño Holguín, Cedeño Andrade y Alcívar Cedeño, quienes recibieron 33 mil dólares por su guachito o fracción.
Jorge Basurto Mendoza, de 52 años, fue el lotero que el pasado 31 de diciembre entregó los guachitos al venderlos de forma fraccionada por la terminal terrestre de Chone. “No soy adivino”, expresó hace once días al responder sobre su sentir tras haber repartido la fortuna que entregó Lotería Nacional al cierre del 2011.
“Suelo dejarme un guachito por semana, pero esta vez estuvo tan bueno el negocio que lo vendí todo”, dijo Basurto.
Hasta octubre pasado, el chonero trabajó como bodeguero y guardián para la coop. Reina del Camino, pero luego se retiró de este empleo.
“Desde entonces me dedico a vender Lotería para el sustento de mi familia: mi esposa y mis cuatro hijos”, expresó el hombre de la suerte.
Encargo de cobro
El ganador del sorteo de la lotería de Navidad, que obtuvo tres millones de dólares, encargó el cobro del premio, por seguridad, a un banco nacional. Compartió su premio con el canillita.
Temor de vendedores
Uno de los vendedores de lotería en Chone contó que había recibido amenazas porque creían que él comercializó uno de los números premiados y recibió un guachito de premio.
Fuente: EL UNIVERSO*
Yo tambien espero ganarme ese pozo algun dia
ResponderEliminar