Las fotografías muestran una serie de propagandas políticas que contrariando las disposiciones del municipio se encuentran en barrios económicamente pobres de la vía a Daule hace una década. Foto: Cortesía
Fotógrafo local inicia un proyecto, cuyo fin es captar los muros y espacios públicos de la urbe que contienen propaganda electoral del alcalde Nebot, quien emprendió una campaña para terminar con los grafitis de la urbe.
Un Jaime Nebot Saadi gigante, pintado de azul, que es en realidad una silueta de color raspada por el clima y el tiempo, abre el ensayo fotográfico de Juan Alberto Angulo.
En 21 imágenes captadas en diferentes puntos de Suburbio, aparece la muestra visible del marketing político utilizado por el entonces candidato a presidente y alcalde, quien, señalando que debían tener el permiso de la administración para realizar intervenciones urbanas, el mes pasado decidió borrar los murales de una agrupación llamada Litro por mate.
Fue precisamente este hecho el que motivó a Angulo, colaborador del centro fotográfico Diapo 35 mm, dirigido por Chema González, a darse prisa y adelantar su proyecto inicial.
“Píntate este” era parte de un proyecto político más complejo que consistía en documentar todos los muros donde aparecieran políticos en la ciudad, esto venía acompañado de una investigación sobre quiénes fueron y qué hicieron estos candidatos en el caso de que hayan alcanzado sus objetivos”, explica González.
En las fotografías aparecen fondos amarillos con letras azules en los que rezan “Nebot, Presidente”, pintados hace 15 ó 19 años. También hay imágenes que invitan a votar por la Lista 6 (Partido Social Cristiano).
Dichas impresiones aún sobreviven en los barrios empobrecidos de la vía a Daule. “Algo así no lo verías nunca en Los Ceibos, la gente no se da cuenta de que las propagandas aún existen, están pintadas en paredes de los barrios marginales”, denuncia González.
Esas “pinturas”, que van en contra de las disposiciones que el mismo Municipio ha dispuesto para la remoción de los mensajes políticos, no han sido borradas en el cantón.
Una de las restricciones del gobierno local establece que los partidos y movimientos deben remover la propaganda o pintar con “colores adecuados” los inmuebles utilizados para estos fines.
En el 2011, el cabildo ordenó que, transcurridos 30 días después de que terminara la contienda electoral, debían borrarse los signos partidistas de las vía pública.
La Ordenanza Municipal, en el texto oficial publicado por esta administración en su página web con fecha del 25 de junio del 2011, establece, incluso, que el Municipio pintará las propagandas de quienes no cumplan con la disposición legal y establecerá los gastos “ocasionados por esta acción, los cuales serán cobrados a quienes correspondan, a través de la emisión de títulos de crédito exigibles por vía coactiva”.
Para González la propaganda trazada en las paredes demuestra que existe en el país una forma de hacer política que coloca a la repetición sobre el debate. “(Los políticos) creen en la efectividad de repetirte cien veces”.
"Píntate este" es la primera parte de un proyecto que Angulo planea continuar y piensa llamarlo: “Píntate esta otra”.
Los fotógrafos aseguran que no pertenecen a ningún partido o movimiento político, pues sienten que ninguno los representa.
En su nuevo trabajo incluirán otras fotografías de diferentes organizaciones políticas que han dejado sus huellas intactas en diferentes puntos de la ciudad.
Hasta ahora han encontrado campañas de los ex presidentes Jamil Mahuad y Abdalá Bucaram.
Para realizar la primera fase de “Píntate este” recibieron la ayuda de muchos niños que viven en los sectores donde hay propaganda.
“Íbamos a las escuelas y les ofrecíamos participar en un juego: les decíamos que al que nos ayudara a encontrar una propaganda pintada le daríamos $ 0, 25, ellos corrían y aparecían de pronto con la noticia de que había una (publicidad política) en la esquina, y así cada vez se sumaban más niños al juego”, recuerda González.
El fotógrafo plástico no cree en las revoluciones culturales, pero le tiene fe a las pequeñas acciones que ataquen algunas partes de un sistema que considera reaccionario.
“El Alcalde tiene aún esas pintadas en la calle, pero decide borrar los murales de una agrupación”, añade.
Resalta que la censura previa en el Salón de Julio, aplicada este año, y la posterior demanda de Xavier Flores y Andrés Crespo, agitaron el panorama artístico local.
El ensayo fotográfico puede verse en la dirección electrónica: http://diapo35mm.blogspot.com
Fuente: EL TELÉGRAFO*
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