Esto, luego del cambio de alerta naranja a amarilla en todo el perfil costanero.
Desde la mañana de ayer, sitios turísticos como la isla de Jambelí (El Oro) y Salinas (Santa Elena) reactivaron sus negocios.
El clima ayudó en lugares donde, incluso, amaneció con llovizna. “El sol salió después del mediodía; en la mañana solo se registraron olas de hasta 40 centímetros, en el norte de la provincia”, informó Jaime Lasso, capitán del Puerto de Salinas.
La emergencia fue activada la noche del miércoles por la Secretaría Nacional de Riesgos (SNGR), tras un informe del Instituto Oceanográfico de la Armada (Inocar). En él se prevía un oleaje fuerte de más de 4 metros, acompañadas con fuertes vientos.
Ya sin emergencia, Mónica Jaramillo, gerenta de Avista Travel, dijo que debe ampliar el número de frecuencias de tres embarcaciones, con capacidad de 60 personas en conjunto. Los recorridos son para observar ballenas.
La firma recién pudo reiniciar la navegación después de las 14:00 del viernes. Es decir, la empresa tiene un día y medio de atraso que debe reponer para atender a quienes hicieron reservaciones.
En Jambelí, en cambio, no están muy contentos con los resultados.
La prohibición de ingresar al mar causó pérdidas a sus habitantes, según Clemente Medina, presidente de la Junta Parroquial. La inversión de los 65 locales turísticos, entre restaurantes, bares y discotecas, promedió los USD 1 500 por negocio. La previsión es que no podrán recuperar los cerca de USD 97 000 invertidos, para recibir a 12 mil personas.
Por ello, analizan la posibilidad de demandar al Gobierno, por perjuicios económicos.
Medina expresó que la acción legal sería en contra de la SNGR y el Inocar. No fue posible un pronunciamiento sobre este tema entre sus representantes.
La Gobernación de El Oro dijo que a las 11:00 los evacuados de las islas Bellavista y Costa Rica ya habían regresado a sus hogares. Para entonces, la playa Jambelí ya estaba abierta al público.
El sector pesquero artesanal, en cambio, retomó su actividad al 100% ayer. En el puerto de Santa Rosa (Santa Elena), 1 325 embarcaciones realizaron sus faenas de pesca, tras dos días de para.
Así lo dio a conocer Ramón González, titular de la Cooperativa Pesquera Santa Rosa. “Toda la actividad se realiza con normalidad, a pesar del período de aguaje. Un grupo salió al mar desde el viernes, pero todos lo hicimos desde hoy (ayer)”, comentó.
El despliegue de policías y funcionarios de los Comités de Operaciones Emergentes (COE) provinciales continuará, como medida de prevención, durante el feriado, según la SNGR. La responsabilidad de las restricciones será manejada localmente por cada uno de los COE provinciales.
Mientras tanto, en Esmeraldas, a pesar de los anuncios de oleajes, los turistas llegaron, pero no en la medida que se esperaba (60 000), según la presidenta de la Cámara de Turismo de Atacames, Antonia Montaño. Se calcula que a las playas esmeraldeñas llegaron unos 30 000 turistas.
Por eso, dijo que presentarán el lunes al presidente Rafael Correa, una queja por la desinformación de Inocar.
Según la dirigente, de alguna manera la alerta hizo que mucha gente que había decidido venir a las playas se quedara en Quito, por el temor de los oleajes. “No quiero pensar que fue intencional”, asegura Montaño.
El presidente de la Unión Provincial de Cooperativas Pesqueras de Esmeraldas (Uprocoopes), Ovidio Quiñónez, señaló que los vientos y oleajes, como los reportados por el Inocar, en agosto son normales en la Costa.
“No sé por qué se alarmó a los turistas, si los aguajes y vientos fuertes por estos meses siempre se dan. Eso lo sabe todo pescador”, subraya Quiñónez.
Como en carnaval, así calificó al feriado por el 10 Agosto, Celia Higuera, presidenta de la Cámara de Turismo de Manta. Dijo que la alerta naranja decretada por el Gobierno ante la posible llegada de oleajes en las costas del país no fue impedimento para que los turistas busquen las playas para disfrutar los tres días del feriado.
La empresaria es propietaria del Hotel Lun Fun en Manta. El 80% de sus 44 habitaciones fueron reservadas con 15 días de anticipación. Nadie canceló, los clientes llegaron, indicó.
Fuente: EL COMERCIO
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