Miles de transportistas ratifican su apoyo al Gobierno Nacional

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Representantes de agremiaciones se reúnen esta mañana en el Coliseo Rumiñahui, en Quito. Foto: María Elena Vaca/El Telégrafo

El presidente Rafael Correa se reunió esta mañana con los transportistas del país. 

Las Federaciones Nacionales del Transporte Terrestre invitaron al Jefe de Estado al encuentro que se desarrolló en el Coliseo General Rumiñahui, en el norte de Quito.

En la reunión, los transportistas ratificaron el apoyo al Mandatario y al proceso democrático, tras resaltar los cambios que ha vivido el país durante los 8 años del gobierno del presidente Correa. 

Entre las acciones gubernamentales que han beneficiado al sector, mencionaron los créditos de la Corporación Financiera Nacional (CFN) para adquirir modernas unidades, el Plan Renova (chatarrización de automotores usados), la exoneración de aranceles, la inversión de $ 130 millones de dólares en kits de seguridad, entre otras.

En la cita estuvieron presentes miembros de la Federación de Transporte de Pasajeros, Federación Nacional de Transporte Liviano del Ecuador (Fenacotrali), Federación Nacional de Transporte por Carreteras (Fenacotip), Cámara Nacional de Transporte y del Medio Ambiente del Ecuador (Canastrape), Federación Nacional de Transporte Escolar e Institucional (Fenatei), entre otras agrupaciones.

Este sector también le hizo conocer al Mandatario un pliego de peticiones que son parte del diálogo por la equidad y justicia social. Además, rechazaron la marcha convocada por grupos opositores para el 13 de agosto. Adicionalmente, pidieron al Jefe de Estado presentarse a un nuevo período de Gobierno. 

"Este gobierno está con ustedes", apuntó de su lado el presidente Correa a los transportistas a quienes pidió "a rechazar ese pasado que no volverá".

"Ya no estamos dispuestos a tolerar que una engreída minoría quiera imponernos su agenda", añadió Correa al tiempo que enfatizó que no han logrado demostrar que los proyectos de leyes de herencia y plusvalía afectan a los pobres y la clase media. (I)


Fuente: EL TELÉGRAFO