El impacto que se llevaron los periodistas colombianos cuando ingresaron al Ecuador por el puente Rumichaca fue más grande que su descontento por las carreteras que ellos pudieron observar en el departamento del Cauca y Nariño.
Nunca imaginaron encontrarse en las carreteras ecuatorianas “una señal inequívoca de progreso”.
En un símil que realizó el programa de televisión colombiana Uno Noticias entre las carreteras ecuatorianas y colombianas se exponen con claridad las diferencias. Desde Rosas hasta Ipiales (pasando por Nariño) se puede mirar carreteras estrechas, con huecos y con el pavimento quebrado. Incluso el reportaje muestra lo peligroso que puede ser el rebasar por esas vías.
En el reportaje también se recogen comentarios de conductores de vehículos pesados que admiten que las carreteras en el Sur de Colombia generan riesgos para los conductores. Las vías en mal estado “maltratan mucho el carro y se pierde tiempo”, admite Carlos Ayala, conductor.
El paisaje en Ecuador cambia. Desde Tulcán hasta Ibarra los periodistas colombianos pudieron admirar vías de seis carriles como la Otavalo-Ibarra, en donde se puede viajar con más rapidez y seguridad. Además la ruta cuenta con iluminación horizontal y vertical. Tiene 18,9 kilómetros, un intercambiador en el ingreso a Cotacachi y un paso a desnivel en Atuntaqui.
La obra estuvo a cargo de la empresa Panavial, concesionaria de la carretera Panamericana.
Hace seis meses, el presidente Rafael Correa recordó que para construir esa ruta se realizó un proceso de indemnización a propietarios de los terrenos y casas ubicados al pie de la vía, que fueron expropiados y por lo que el Estado pagó cerca de 6 millones de dólares.
La televisión colombiana muestra las quejas de pobladores colombianos y comentarios de ecuatorianos contentos por las obras viales. “En Colombia hay tanto ingeniero y no sé porque no arreglan las vías”, replica un camionero colombiano.
Por su parte, un sargento de la policía ecuatoriana afirma que el mejoramiento de las vías en su país benefició a los pueblos, a los transportistas y a los trabajadores”.
La Vía Panamericana (que en el caso de Nariño es la única forma de conexión con Latinoamérica y es un compromiso firmado por varios países en la conferencia Internacional de la OEA en 1923) inicia en Alaska y termina en Buenos Aires. Según el reportero colombiano todos han avanzado en esto menos Colombia que muestra 30 años de retraso.
Además la conductora de Uno Noticias resalta que “mientras un peaje en Nariño cuesta 7700 pesos, en Ecuador en vía de seis carriles el peaje en Ecuador vale un dólar es decir 1850 pesos”.
Fuente: EL CIUDADANO*
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