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Tras el referendo del domingo que aprobó el voto de paraguayos en el extranjero, Irma Pérez, líder de los migrantes organizados en España, pidió a la clase política la industrialización del Paraguay para evitar que otros miles sigan viajando al exterior en busca de trabajo.
Los últimos datos de la Justicia Electoral sobre la jornada del domingo señalan: el Sí obtenía el apoyo del 77,82% de los electores (272.834 votos), en tanto que el No se quedaba con el 21,05% (73.793 votos). La información correspondía al escrutinio de 4.885 de las 5.309 mesas, lo que representa un conteo del 92%.
Hubo una participación de 12,54% sobre 3 millones de personas mayores de 18 años de edad habilitadas para el sufragio. La población total del país es de 6,8 millones de individuos.
"Son paraguayos no sólo los que viven en el país sino también los que están en otros países ya sea estudiando o trabajando, pero es muy difícil ser migrante porque se abandona a la familia, principalmente", dijo Pérez, según pública la página digital de la estatal Radio Nacional.
Pidió "a los políticos que industrialicen el Paraguay para evitar que se siga viajando al extranjero en busca de trabajo".
El ministro de Justicia y Trabajo, Humberto Blasco, comentó que el gobierno "está conforme con el resultado positivo del referendo. Fue un triunfo de la ciudadanía dándole al migrante el derecho al voto".
Alberto Ramírez, presidente de la Justicia Electoral, anunció que probablemente a fines de esta semana presentará el informe final del referendo ante los presidentes del Ejecutivo, Legislativo y Judicial, en un acto público.
Pérez, presidenta la asociación de paraguayos residentes en España, exteriorizó su alegría por el respaldo de los electores hacia la propuesta de enmienda constitucional autorizando, por primera vez en la historia del país, el voto en el extranjero pero sólo para candidato de listas nacionales como presidente, vicepresidente, senadores y parlamentarios del Mercosur.
No podrán elegir a diputados departamentales ni alcaldes municipales, gobernadores ni miembros de la legislatura departamental porque par el efecto el ciudadano necesita vivir en la misma zona que los aspirantes.
El Congreso tendrá que resolver próximamente si los paraguayos en el exterior ya votarán en los comicios nacionales de 2013 o tendrá que esperar hasta 2018 mientras se modifica la ley electoral que actualmente no permite a la Justicia Electoral la organización de comicios en terceros países.
El gobierno no posee una estadística sobre la cantidad de paraguayos que residen en el exterior, pero voceros de asociaciones de inmigrantes informaron extraoficialmente días atrás durante un congreso de migrantes la presencia de 500.000 en Argentina, 30.000 en Nueva York y sus alrededores y 90.000 paraguayos en España.
No obstante, la comisión no gubernamental Verdad y Justicia dirigida por monseñor Mario Melanio Medina, obispo de las diócesis Misiones y Pilar, concluyó en 2009 en un libro de 4.000 páginas que durante el régimen del general Alfredo Stroessner, aproximadamente 1.500.000 se marcharon al exterior "en exilio económico".
Esa comisión investigó crímenes de lesa humanidad durante los 34 años de gobierno de Stroessner (1954-1989), cuyos sobrevivientes y familiares son actualmente indemnizados por el Estado.
Los últimos datos de la Justicia Electoral sobre la jornada del domingo señalan: el Sí obtenía el apoyo del 77,82% de los electores (272.834 votos), en tanto que el No se quedaba con el 21,05% (73.793 votos). La información correspondía al escrutinio de 4.885 de las 5.309 mesas, lo que representa un conteo del 92%.
Hubo una participación de 12,54% sobre 3 millones de personas mayores de 18 años de edad habilitadas para el sufragio. La población total del país es de 6,8 millones de individuos.
"Son paraguayos no sólo los que viven en el país sino también los que están en otros países ya sea estudiando o trabajando, pero es muy difícil ser migrante porque se abandona a la familia, principalmente", dijo Pérez, según pública la página digital de la estatal Radio Nacional.
Pidió "a los políticos que industrialicen el Paraguay para evitar que se siga viajando al extranjero en busca de trabajo".
El ministro de Justicia y Trabajo, Humberto Blasco, comentó que el gobierno "está conforme con el resultado positivo del referendo. Fue un triunfo de la ciudadanía dándole al migrante el derecho al voto".
Alberto Ramírez, presidente de la Justicia Electoral, anunció que probablemente a fines de esta semana presentará el informe final del referendo ante los presidentes del Ejecutivo, Legislativo y Judicial, en un acto público.
Pérez, presidenta la asociación de paraguayos residentes en España, exteriorizó su alegría por el respaldo de los electores hacia la propuesta de enmienda constitucional autorizando, por primera vez en la historia del país, el voto en el extranjero pero sólo para candidato de listas nacionales como presidente, vicepresidente, senadores y parlamentarios del Mercosur.
No podrán elegir a diputados departamentales ni alcaldes municipales, gobernadores ni miembros de la legislatura departamental porque par el efecto el ciudadano necesita vivir en la misma zona que los aspirantes.
El Congreso tendrá que resolver próximamente si los paraguayos en el exterior ya votarán en los comicios nacionales de 2013 o tendrá que esperar hasta 2018 mientras se modifica la ley electoral que actualmente no permite a la Justicia Electoral la organización de comicios en terceros países.
El gobierno no posee una estadística sobre la cantidad de paraguayos que residen en el exterior, pero voceros de asociaciones de inmigrantes informaron extraoficialmente días atrás durante un congreso de migrantes la presencia de 500.000 en Argentina, 30.000 en Nueva York y sus alrededores y 90.000 paraguayos en España.
No obstante, la comisión no gubernamental Verdad y Justicia dirigida por monseñor Mario Melanio Medina, obispo de las diócesis Misiones y Pilar, concluyó en 2009 en un libro de 4.000 páginas que durante el régimen del general Alfredo Stroessner, aproximadamente 1.500.000 se marcharon al exterior "en exilio económico".
Esa comisión investigó crímenes de lesa humanidad durante los 34 años de gobierno de Stroessner (1954-1989), cuyos sobrevivientes y familiares son actualmente indemnizados por el Estado.
FUENTE:**EL UNIVERSO
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