viernes, 21 de octubre de 2011

Fenómeno “La Niña” afectará a Ecuador en 2012, según expertos

***SNN




(Andes).- El fenómeno climático ‘La Niña’ estará presente en Ecuador en el 2012, así lo confirmaron a la Agencia Andes expertos ecuatorianos, quienes aclaran que el evento será de intensidad leve, pero es necesario adoptar precauciones.


El coordinador regional del Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), Raúl Mejía, explicó que la presencia constante de La Niña en el país se debe al cambio climático que experimenta el planeta, lo que provoca el enfriamiento del océano Pacífico y la humedad de la cuenca Amazónica.


Este fenómeno, en particular, afecta al sector agrícola, pues se caracteriza por la disminución en la frecuencia de lluvias, pero aumento en la intensidad de las mismas. “Los agricultores esperan que el clima se estabilice y eso no va a ocurrir”, enfatizó el experto.


Por eso recomienda tomar precauciones para la siembra de las cosechas ya que el fenómeno se extenderá desde finales de diciembre hasta mediados de mayo del próximo año.


Por su parte el coordinador científico del Centro Internacional para la Investigación del fenómeno El Niño (Ciifen), Rodney Martínez, confirmó a Andes la irregularidad que provocará La Niña el próximo año. “Van a existir más veranillos prolongados, seguidos de épocas lluviosas fuertes e incluso torrenciales”, pronosticó.


La Niña podría causar problemas de inundaciones en la cuenca baja del Guayas y en el Golfo de Guayaquil, no solo por las precipitaciones, sino por la elevación del nivel del mar y el incremento de la intensidad de los vientos.


Advirtió que en la cuenca del Guayas existe vulnerabilidad en la población, 10 veces más altas que las registradas en el último fenómeno de El Niño (1997-1998). Esto se debe al incremento de asentamientos en zonas de riesgo, malas intervenciones en la regulación de la cuenca hídrica y la migración interna, “el nuevo habitante desconoce cómo enfrentar inundaciones”.


Actualmente se trabaja con autoridades de municipios y prefecturas de zonas vulnerables para que incluyan en sus agendas políticas de prevención, ya que eventos extremos afectarían los suministros de agua potable y sistemas de alcantarillado.


A nivel ciudadano se realizan campañas de adaptación a los cambios climáticos. “Los eventos climáticos extremos no se pueden detener, es imposible, pero sí aprender a vivir con esas alteraciones o variaciones del clima”, concluyó.

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