Armando Paredes acusado de participar en secuestro exprés

***SNN

Imagen de archivo

El futbolista Armando Paredes, conocido como el "malcriado", se ha visto envuelto en un nuevo caso de escándalo al ser involucrado en un delito de secuestro exprés en el cual supuestamente habría participado el jugador.



Un ciudadano identificado como Javier Izurieta denuncia haber sido objeto de un secuestro exprés la noche del pasado jueves luego de tomar un taxi amigo cuando salía del centro comercial Policentro.


El taxista lo condujo de manera normal hasta llegar a la zona céntrica de la urbe. Recuerda que en pleno parque del Centenario se les cruzó en el camino un auto Chévrolet Steem, color plomo del cual se bajaron unos desconocidos con arma en mano y lo llevaron a dar varias vueltas por la ciudad.


Durante el recorrido fue despojado de sus pertenencias de valor, entre celulares, documentos y las tarjetas de créditos. Bajo amenazas de muerte fue obligado a entregar las claves de las tarjetas mientras continuaban recorriendo la ciudad.


Más de dos horas pasaron hasta ser liberado en las calles de urbe procediendo a dejar por sentada la denuncia. Así mismo, reportó el robo de las tarjetas a fin de lograr bloquearlas para cualquier transacción.


Desde la entidad bancaria recibió la notificación que uno de los lugares donde realizaron compras con sus tarjetas era un economarket situado en las calles Carlos Luís Plaza Dañín y Miguel H. Alcívar. Por ello procedió a verificar la situación en compañía de agentes policiales.


En el lugar el dependiente, quien reserva su identidad, supo expresar que al lugar "llegaron tres personas en un auto Chévrolet Steem, color plomo; entre ellos se encontraba el jugador Armando Paredes quien se mostraba tranquilo y actuaba con normalidad".


El despachador recuerda que pidieron varias botellas de licor de las marcas más caras hasta lograr una cuenta por 390 dólares que cancelaron con la tarjeta de la víctima. Luego decidieron volver a comprar otras botellas y esta segunda cuenta ascendía a 600 dólares.


Cuando vuelven a pagar con la tarjeta, el dependiente se percata que no pertenecía a quienes la portaban y decide no realizar el cobro. "Los sujetos se pusieron nerviosos, se metieron en el carro y se fueron" declaró el encargado del negocio.


Esta situación deja una tela de dudas en el perjudicado, quien afirma que si se trata del jugador exigirá que se haga justicia. De ser el caso que no esté involucrado "que de la cara y responda por su inocencia" aseveró.


Entre los detalles que el vendedor entregó a los miembros de la policía destaca el hecho de asegurar que el jugador "había llegado al lugar a comprar licores en varias oportunidades, pero esta era la primera vez que alguien se presentaba a reclamar por lo sucedido" expresó el cabo segundo de policía Carlos del Pezo.


Fuente: EXPRESO*