La noche del domingo el júbilo de los ciudadanos promanabitas colmó las calles de las localidades de Santa María y Paraíso la 14, de La Manga del Cura.
A las 19:00 el Consejo Nacional Electoral (CNE) anunció el resultado oficial de la consulta popular para definir la pertenencia de esa localidad. La opción por ser parte de Manabí derrotó a la de Guayas, con el 64% sobre 33%.
El festejo, que incluyó caravanas motorizadas y enarbolamiento de banderas verde, blanca y roja, en balcones, ventanas y portales, se extendió hasta altas horas de la noche. Hubo música y abrazos.
Pero ayer en la mañana el panorama debía cambiar. Todos volvieron nuevamente a sus actividades habituales, a esas a las que han estado acostumbrados desde que llegaron a este rincón del país.
En los centros poblados el comercio se desarrolló como siempre y esa algarabía dio paso al trabajo cotidiano.
Una leve llovizna cayó sobre la localidad de Paraíso la 14. Una fina capa de lodo se formó sobre su arteria principal, la calle 12 de Octubre.
Ayer fue un día como todos: cada uno con sus actividades habituales. Atrás quedó la euforia. Ahora sus pobladores coinciden en que, una vez que definieron su pertenencia, se vienen nuevos desafíos. Si bien afirman que ya tienen a quién exigir sus derechos, también saben que deben asumir responsabilidades.
A Wilson Alarcón y Steven Alcívar, moradores de este recinto, el resultado de la consulta no les sorprende.
“Se dio lo que se esperaba, este territorio siempre fue manabita, desde que tengo conocimiento, aunque vengo desde el cantón Santa Ana (Manabí)”, afirma Alarcón, cuya principal actividad es ser árbitro de fútbol.
Lo mismo cree su compañero, aunque agrega que era triste para ellos vivir en un lugar sin una definición territorial.
“Estábamos botados, no teníamos autoridad que nos respaldara ni derecho a nada”, sostiene.
En las calles de esta localidad aún se observan en las ventanas las banderas de Manabí y Guayas que ondean y ofrecen un paisaje policromático.
Incluso en el parque central se lee un rótulo del Gobierno Autónomo Descentralizado de El Empalme (Guayas) y varias casas pintadas de celeste y blanco que denotan que allí habitan quienes optaban por la opción que perdió.
Es el caso de Silvana Unapanta, quien junto con su familia administra el comercial ‘Silvanita’ en el centro de la población. Ese local se encuentra en un edificio en cuya parte alta ondea una gigantesca bandera de Guayas. No oculta su desazón, pero acepta el resultado.
“Hay que aceptar lo que la mayoría eligió y de aquí en adelante llevar la fiesta en paz; el hecho de ser ahora de otra provincia no nos quita nuestras raíces”, comenta la mujer de 27 años.
Pero más allá del resultado, todos aseguran que la ventaja de esto es que ahora se abre un camino para un mejor desarrollo en la localidad.
Y es que las necesidades son diversas, sobre todo por el déficit de servicios básicos. En todos los recintos y localidades de La Manga del Cura coinciden que requieren de agua potable y alcantarillado sanitario. El líquido lo obtienen de pozos, como en Santa María o La Palizada, o como en Paraíso la 14, de un tanque elevado, que tiene cerca de 40 años y está obsoleto.
El tanque se encuentra dentro de los predios de la escuela Juan Antonio Vega y su vetustez se nota por el color pardusco de su estructura.
“La Prefectura de Manabí ya está construyendo otro tanque porque este es un peligro, parece que en cualquier momento puede caer”, advierte José Lizardo González, quien nació en el cantón Alamor (provincia de Loja) y llegó a esta localidad hace 42 años. El alcantarillado no existe. En las casas, cada familia ha construido un pozo ciego, mientras que la energía eléctrica por momentos es intermitente. (I)
Datos
Uno de los desafíos de las autoridades y pobladores es la legalización de tierras y el pago de impuestos. Existen viviendas y lotes con compromisos de compraventa.
En cuanto al pago de los tributos la situación es más compleja, por cuanto hay casos como el de José Aguilar, quien afirma que cancela sus impuestos al Municipio de El Carmen, en Manabí.
Silvana Unapanta está en un dilema, pues ella tiene su propiedad inscrita en El Empalme, en Guayas. “No sé si seguir pagando allá o cómo hacer porque no quiero retrasarme”, sostuvo.
Jairala: “En Guayas se queda quien quiere”
“En Guayas se queda quien quiere”, enfatizó el funcionario al mismo tiempo de destacar la mayoritaria participación de los empadronados para la consulta popular del domingo.
También recordó los trabajos realizados recientemente en la zona y que para ello “siempre existió la mejor disposición”.
Calificó positivamente la labor del CNE durante el sufragio, pero también señaló las irregularidades que se dieron en el mismo.
En su página de Facebook, Jairala criticó la presencia de su similar de Manabí, Mariano Zambrano, en La Manga del Cura, mientras los ciudadanos votaban. Además mostró fotos de personas afines a la Prefectura de esa provincia que -supuestamente- repartían alimentos y bebidas a los habitantes.
“Que el pueblo de Guayas sepa que nosotros fuimos celosos cumplidores de las normas electorales y que en ningún momento violamos esas disposiciones”, dijo Jairala.
Pese a la polémica surgida -tanto públicamente como en redes sociales- entre los gobiernos provinciales de Guayas y Manabí, el Prefecto aseguró que su administración está dispuesta a ayudar a la de Zambrano, en lo que él estime necesario.
Exhortó a que la Prefectura de Manabí cumpla con la oferta de campaña realizada a los 24 mil habitantes de La Manga del Cura, donde el 80% es de origen manaba.
En semanas recientes, la Prefectura de Guayas recibió el apoyo del alcalde Jaime Nebot, quien afirmó que La Manga del Cura es de Guayas.
El burgomaestre reconoció que administraciones anteriores a la de Jairala -incluyendo la de su coideario Nicolás Lapentti- descuidaron la zona y no se realizaron obras. (I)
Fuente: EL TELÉGRAFO
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