Un vídeo que circula en Internet destapó tabúes sobre los lugares más exóticos para marcarse el cuerpo.
Desde que salió el vídeo en la red ha tenido innumerables visitas, la chica indicó que quería imponer una moda.
Esta moda crece entre las mujeres. No es raro verlas con un tatuaje que atraiga las miradas masculinas, pero ¿qué pasaría si usted decidiera tatuarse en los lugares más íntimos de su cuerpo?.
Jil Danne, de 23 años, se presentó desnuda en la décima séptima Convención de Tatuajes del Sur de Florida y sin ningún tipo de tapujos se tatuó los contornos del ano con los nombres de sus dos mejores amigos.
Antes de someterse al ritual de los colores y agujas probó que no tenía ningún tatuaje realizado. Al terminar este arte, Jil Danne dijo que lo hizo “antes de que se ponga de moda marcarse esta parte íntima”. En un breve recorrido por varios lugares del “tattoo” en Guayaquil se pudo apreciar que las chicas se marcan la piel más que los hombres.
Leonardo Valenzuela, joven tatuador que estudió dibujo en Bellas Artes, indicó que las mujeres buscan tatuajes sexis y llamativos y estas preferencias aumentan en la ciudad.
Al preguntarle si ha tatuado a alguien en sus zonas íntimas, Valenzuela dijo que nunca ha tenido esta experiencia. Lo más cerca que ha llegado en un cuerpo femenino ha sido la zona pélvica.
“NO ES NOVEDAD TATUARSE EN LAS ZONAS ÍNTIMAS”
La tatuadora Cindy Parra, en su local ubicado en la ciudadela Kennedy, comentó que muchas veces estuvo muy cerca de las zonas sexuales.
A un hombre lo tatuó en su zona pélvica, arriba del pene, y recordó que cierta tarde una colombiana quería que le retoque un tatuaje de una enredadera que nacía en su parte trasera hasta el centro de la espalda, pero el trato nunca se concretó.
Parra dijo que las partes íntimas son delicadas y susceptibles en mayor proporción por la inflamación e infecciones. Además, llevar un tatuaje significa enseñar el arte de dibujar sobre la piel “cosa que no ocurre en esos casos”.
“ESTO ES ARTE, NO NOVELERÍA”
La artista plástica Mona Iturralde señala que en su piel se ven obras de arte y siempre está actualizándose en estos temas, participando en convenciones internacionales.
“El tatuaje en una mujer no siempre luce sexy”, indica, ya que “depende de muchos factores, como por ejemplo, el diseño y la ubicación en el cuerpo, incluso el color de la piel influye mucho en el resultado”.
Según la artista, una mujer no se debería tatuar solo por novelería. Lo cierto es que el gusto a lo prohibido y novedoso atrae al mundo y se convierte en una rara moda. El “tattoo” en nuestra sociedad gana terreno sobre la piel y cuerpo de mujeres y varones.
No se puede tinturar el recto
El ginecólogo Bernardo Calderón Costales sostiene que tatuarse las zonas sexuales pueden traer riesgos como inflamaciones e infecciones “si no se toma en cuenta la asepsia con la que se debe realizar este trabajo”.
Además, asegura que el ano no es piel, “es una zona de venas que no podrían receptar tinta, lo que sí podría marcarse es la zona perianal, el contorno, porque eso sí es piel”.
En cuanto a la zona de la vulva, esto puede ocasionar una vulvitis, es decir una inflamación severa de los labios vaginales, porque en la zona interior hay mucosa.
Fuente: EXTRA*
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