Cada año Manta se alista para recibir a los turistas de la Sierra para disfrutar de las playas, como El Murciélago. Foto: Rodolfo Párraga / El Telégrafo
Esta temporada y el carnaval son las más importantes del año. Los hoteles, restaurantes y comerciantes se preparan con anticipación a fin de dar un buen servicio a los foráneos.
El quiteño Cristian Chicaiza aprovecha los primeros días de vacaciones en Manta. Disfruta del radiante sol y la playa en compañía de su familia. “Me gusta este balneario porque es limpio, la gente es cálida y amable”, refiere luego de un chapuzón en el sector El Murciélago.
La temporada de turistas de la Sierra se activó como indica el comerciante Antonio Flores, quien labora en esta playa. “Ya se ven los visitantes a diario”, dijo.
Todos se han preparado.
Flores comentó que ellos están listos para darle buena atención a los visitantes, la mayoría es procedente de la Sierra. “Aquí hay cámaras de seguridad y la Policía patrulla permanentemente. Incluso les indicamos el significado de las banderas para que sepan si pueden o no ingresar al mar”, expresó.
Solo en Manta se espera el arribo de unos 200 mil turistas. El cálculo lo hizo el departamento de Turismo Municipal, dirigido por Andrea Zambrano.
La dependencia ha organizado distintos eventos en esta temporada, considerada una de las mejores del año con la de carnaval.
Entre los actos programados están la carrera Ruta del Pacífico, que se realizará el 19 de julio.
En la temporada también se desarrollará el torneo internacional Iron Man, previsto para el 9 de agosto, con el cual se pretende potenciar la región en lo deportivo y turístico.
Además, se cumplirá la final del Campeonato Nacional del Encebollado, por realizarse el domingo 16 de agosto. Solo ese fin de semana se estima que habrá 30 mil visitantes.
La funcionaria indicó que como el número de camas para albergar a turistas es de 4.000 en la ciudad, dialogó con sus similares de Portoviejo y Montecristi para que reciban a los foráneos. “Queremos que vengan y que no se vayan a otros lugares”, señaló.
La mayoría de los hoteles está listo, según los administradores. En el Balandra Hotel poco a poco llegan los pedidos de reservaciones. “Estamos ofertando un paquete todo incluido, donde la persona tendrá alimentación, hospedaje y servicio de turismo para que pueda disfrutar de la ciudad”, explicó el gerente Paúl Andrade.
Otros locales, como el restaurante Los Delfines, en el Malecón Escénico, también invierten para mejorar la infraestructura y contratan más personal.
Monserrate Barcia, empleada del lugar, explicó que hay platos, entre ellos el pescado apanado o cebiche, que cuestan $ 4,75, mientras otro, que contiene el camotillo, vale $ 13. Una bandeja marinera, que incluye conchas, calamares, camarones, trozos de pulpo de piedra y langostinos, tiene el precio $ 20.
Adicionalmente, se ofrecen paseos en la Costa por un lapso de 30 minutos. “Se da la vuelta en todo lo que es el puerto. Allí se observan piqueros patas azules. El tour por persona vale $ 2,50”, explicó Onofre Benítez, operador turístico.
En el Parque del Marisco también se ofrecen platos a la carta y cada local tiene su especialidad. El único inconveniente es el acceso a los carros que es restringido. (I)
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