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JIPIJAPA, Manabí. Un cuerpo no ha sido identificado.
Dos cuerpos, uno de ellos hasta ayer inidentificado, fueron hallados la noche del pasado lunes en zonas rurales de los cantones Puerto López y Paján.
La Policía informó que cerca de las 20:00 de ese día fue descubierto en el recinto Caña Brava, de la parroquia Alejo Lascano, el cadáver en proceso de descomposición de un joven de unos 25 años y que al momento del hallazgo tendría dos días de fallecido.
La única señal de identificación del joven es que vestía una camisa color gris, pantalón jean y zapatos color café, pero no portaba documentos, por lo que hasta la tarde de ayer permanecía como N.N. en la morgue del cementerio del cantón Jipijapa, adonde fue conducido tras su hallazgo.
Se conoció que aún no se le ha efectuado la autopsia de ley, pero agentes que participaron en la diligencia del levantamiento del cadáver indicaron que a primera vista no se detectaban heridas de arma de fuego o de arma blanca.
Con heridaEl otro cuerpo fue hallado cerca de la medianoche del día mencionado en la ruta Machalilla-Puerto López.
La víctima fue identificada como Éber Gonzalo Guerra Socola, de 32 años y oriundo de la provincia de Loja.
A diferencia del primer cuerpo, el de Guerra al momento de ser descubierto era visible una herida profunda presuntamente efectuada con arma blanca a la altura de la pierna izquierda, lo que al parecer le generó una hemorragia que pudo provocar su deceso.
De las primeras indagaciones realizadas por agentes de la Policía se conoció que Guerra había llegado a la localidad de Puerto López a laborar como ayudante de turismo durante esta temporada de avistamiento de ballenas en este balneario del sur de Manabí.
La víctima estaba casada con María Muñoz Vargas, con quien procreó un hijo.
Se conoció que el cuerpo de Guerra fue trasladado a Machala, donde reside la mayoría de sus familiares, y hoy se prevé su sepultura.
Fuente: EL UNIVERSO*
La Policía informó que cerca de las 20:00 de ese día fue descubierto en el recinto Caña Brava, de la parroquia Alejo Lascano, el cadáver en proceso de descomposición de un joven de unos 25 años y que al momento del hallazgo tendría dos días de fallecido.
La única señal de identificación del joven es que vestía una camisa color gris, pantalón jean y zapatos color café, pero no portaba documentos, por lo que hasta la tarde de ayer permanecía como N.N. en la morgue del cementerio del cantón Jipijapa, adonde fue conducido tras su hallazgo.
Se conoció que aún no se le ha efectuado la autopsia de ley, pero agentes que participaron en la diligencia del levantamiento del cadáver indicaron que a primera vista no se detectaban heridas de arma de fuego o de arma blanca.
Con heridaEl otro cuerpo fue hallado cerca de la medianoche del día mencionado en la ruta Machalilla-Puerto López.
La víctima fue identificada como Éber Gonzalo Guerra Socola, de 32 años y oriundo de la provincia de Loja.
A diferencia del primer cuerpo, el de Guerra al momento de ser descubierto era visible una herida profunda presuntamente efectuada con arma blanca a la altura de la pierna izquierda, lo que al parecer le generó una hemorragia que pudo provocar su deceso.
De las primeras indagaciones realizadas por agentes de la Policía se conoció que Guerra había llegado a la localidad de Puerto López a laborar como ayudante de turismo durante esta temporada de avistamiento de ballenas en este balneario del sur de Manabí.
La víctima estaba casada con María Muñoz Vargas, con quien procreó un hijo.
Se conoció que el cuerpo de Guerra fue trasladado a Machala, donde reside la mayoría de sus familiares, y hoy se prevé su sepultura.
Fuente: EL UNIVERSO*
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