MANTA, Manabí. Visitantes quiteños en el hotel Las Gaviotas, el pasado sábado. Otros hoteles tienen también alta demanda.
ATACAMES-MANTA-PUERTO LÓPEZ SALINAS-JAMBELÍ
Llegan en buses y por grupos de hasta 50, entre adultos y niños; otros lo hacen en carros particulares o buses de transporte público. Arriban con entusiasmo y generan expectativas. Son los turistas de la Sierra y el Oriente que en estos días de vacaciones escolares copan las playas de la Costa ecuatoriana. Tan importante es su llegada que en Esmeraldas y en la zona centro norte de Manabí se considera la temporada alta.
En Atacames, Esmeraldas, por ejemplo, esta etapa va de junio a fines de agosto. Los hoteleros y prestadores de servicios se muestran satisfechos, ya que para estos meses el flujo es sostenido durante todos los días y aumenta los fines de semana.
El pasado fin de semana, la ocupación fue del 80% en la mayoría de los hoteles de este balneario, mientras en Súa, la presencia es menor.
Carlos Acosta, director de Turismo de Esmeraldas, dijo que desde el Ministerio del ramo se están impulsando campañas que atraigan a más turistas a esta zona. Agregó que el organismo está controlando que los servicios sean acordes a los precios que se cobran así como una buena presentación y atención a los visitantes.
Antonia Montaño, presidenta de la Cámara de Turismo de Atacames, aseguró que para este año se espera que los ingresos mejoren y se dinamice la economía de Esmeraldas.
Los visitantes muestran su regocijo. El pasado miércoles, por ejemplo, llegó un grupo de 29 niños y 20 padres de familia de la escuela unidocente Municipio de Guaranda, de la comunidad Yurak Uksha de Salinas, provincia de Bolívar.
El profesor Leonardo Rochina contó que cada niño llevaba un quintal de abono orgánico cada mes, para financiar el paseo. Recogieron $ 275. Aportaron además $ 5 cada uno y pagaron los $ 300 del bus y les sobró para el almuerzo, $ 90. Ellos salieron a las 21:00 de su tierra, llegaron a las 09:00. El retorno estaba previsto para las 14:00. “Vale que los niños conozcan su país, el mar, y no solo vean en los mapas”, señaló el docente.
En Pedernales, Canoa, Manta y otras zonas manabitas, los dueños de hoteles y otros negocios ya reciben a cientos de visitantes. Quienes viven del turismo saben que estos son los meses fuertes para la afluencia de personas de la Sierra, especialmente estudiantes, dijo María Belén Lima, empleada del hotel Las Gaviotas, de Manta.
Lima explicó que para lograr atraer a los turistas los administradores del hotel, ubicado en Tarqui, ofrecen paquetes que, además del hospedaje, incluye la alimentación completa.
“Quienes venimos de la Sierra nos gusta visitar Manta porque ofrece una diversidad de lugares para visitar, como playas y una excelente gastronomía”, expresó el pasado sábado uno de los recién llegados en un grupo de 80 personas provenientes de Quito, quienes se quedarán hasta hoy y luego irán a otros lugares manabitas.
Con este mismo objetivo y para disfrutar de las playas también arriban los turistas a los balnearios de Santa Elena. En Salinas se ofrecen paquetes de observación de los cetáceos desde $ 17.
También en Playas hay una aceptable presencia de visitantes que arriban especialmente del Austro y el Oriente. Pero la llegada de visitantes de Cuenca y Loja se concentra principalmente en El Oro, en los balnearios de Bajoalto y Jambelí.
Esa presencia es un alivio para hoteleros y comerciantes de comida y la venta de artículos playeros. La mayoría son estudiantes de escuelas y colegios. Melissa Guachín, estudiante del séptimo año de educación básica de la escuela Julio María Matovelle, de Paute (Azuay), llegó el sábado a la playa de Bajoalto junto a sus compañeros y se quedaron hasta ayer.
Clima
La temperatura de esta época es agradable, según algunos visitantes. El Inamhi registra un mínimo de 22°C en Esmeraldas y el norte de Manabí. La máxima en esa zona está entre 26° y 28°. En la costa central de Manabí y en El Oro, mínima 20°; máxima, 30°. En Playas y Salinas, la temperatura fluctúa entre 19° la mínima y 25° la máxima.
Costos elevados
En Atacames y Manta hay quejas por los altos costos. Los valores de hospedaje suben, por ser temporada alta. En el primer balneario, un cebiche de concha o camarón se lo vende en $ 5 y $ 6. Un encocado de cangrejo cuesta $ 5; de pescado, $ 4; pescado frito, $ 4, arroz marinero, $ 7. El costo de las habitaciones está entre $ 10 y $ 20 por persona. En Manta, en Tarqui, el hospedaje vale $ 8 diarios, mientras que en hoteles similares del centro, la tarifa es $ 25 por noche.
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